El Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales de Andalucía ha dado la razón al Ayuntamiento de Rincón de la Victoria en su contestación al recurso presentado por una empresa contra el procedimiento de adjudicación del contrato de concesión del servicio público del centro deportivo y piscina municipal Christian Jongeneel. Un respiro para el gobierno local (PP-PA) que lleva desde diciembre, que aprobó el pliego de condiciones, esperando poder otorgar la concesión. El organismo autonómico ha paralizado por dos veces el procedimiento de forma cautelar. Todavía quedan tres nuevos recursos por resolver.

"La Ley de Contratos del Sector Público es muy garantista para las empresas que participan en un proceso. Y por tanto, los miembros del organismo sin entrar en profundidad en el asunto se ven obligados a atender los recursos, que en muchos casos son infundados", comentó el alcalde, Francisco Salado (PP) quien puso como ejemplo que una de las empresas que ha quedado fuera por incumplir el pliego de condiciones ha recurrido en defensa de los intereses de otra. "Parece que muchas veces el objetivo es paralizarlo y lo que buscan es que el concurso se quede desierto", añadió el regidor quien espera que la próxima semana se resuelvan estos tres de forma que puedan adjudicar la concesión administrativa de forma definitiva. En este sentido agradeció "el trabajo de los técnicos municipales quienes en la valoración de las ofertas se han ajustado a lo estimado en el pliego de condiciones", indicó Salado.

La empresa adjudicataria tiene dos meses de plazo para equiparla

Con respecto al recurso presentado antes del verano por la empresa sevillana Asistencia Organización y Servicios (AOSSA) por la que el Tribunal paralizó de forma cautelar el procedimiento, ésta ha sido descartada. La interesada alegó que no pudo presentar su oferta porque el último día hábil que podía hacerlo la plataforma de contrataciones del Estado tuvo problemas.

En el plazo de presentación de ofertas se presentaron nueve ofertas siendo tres desestimadas. Una vez que finalice el proceso de adjudicación, la empresa ganadora tiene dos meses para hacerse con el equipamiento y ponerla en funcionamiento. En caso de desestimasen los tres recursos antes de que finalice octubre, la piscina podría abrirse en el mes de enero, de aceptarlos el Tribunal andaluz, el Ayuntamiento tendría que revertir el pliego de condiciones por segunda vez.

El presupuesto para hacerse con la gestión y explotación de este complejo deportivo era inicialmente de 300.000 euros, con un canon de 12.000 euros anuales, que podría haber sido mejora por las empresas ofertantes. El plazo de concesión será de 25 años a partir de la fecha de la formalización del contrato con la seleccionada. En el pliego de condiciones, el Ayuntamiento también valoraba la ejecución de otras instalaciones adicionales como una piscina al aire libre, la reducción de tarifas para los usuarios o la puesta en marcha de bonos para empadronados, jubilados, familias numerosas o con menos recursos.

Las obras de la piscina que ejecutó la empresa pública Tragsa, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, finalizaron en febrero. Se levantan en una parcela de 6.158,28 metros cuadrados de Huerta Julián. Consta de tres niveles con salas deportivas adicionales. El coste es de 3,8 millones de euros.