El Ayuntamiento de Ronda había anunciado que estaba examinando las faroles que están situadas en Carrera Espinel, la principal calle comercial y peatonal de la ciudad del Tajo, tras producirse la rotura de una de ellas y precipitarse al suelo de forma repentina en las puertas del local de una conocida franquicia de ropa. El incidente en aquel momento se quedó en un gran susto sin que se produjesen daños personales, aunque el estudio detectó rápidamente problemas en diferentes pies de las farolas situadas en esta calle, por lo que se anunció que se tomarían medidas para su corrección y se apuntó a la orina de los perros como una de las causas del deterioro de las fases de la farola, además de la antigüedad de las mismas.

Tras ello, ayer se inicio la sustitución de todos los báculos de estas farolas, una medida con la que se espera corregir el problema que se había detectado y evitar así que se puedan producir nuevas roturas que puedan terminar provocando un accidente de mayor gravedad. Los trabajos que van a realizarse se acometerán a primera hora de la mañana para tratar de evitar que pueda afectar a las principales horas del comercio, estando previsto realizar una inversión de unos 18.000 euros. La medida afectará a la totalidad de esta calle, que tiene casi un kilómetro de longitud y en la que existen unas 50 farolas de pie, aunque la iluminación se complementa con focos situados en las paredes de la misma tras una reforma realizada para aumentar la luz.