Las obras de reparación del hundimiento existente en uno de los extremos del Puente Nuevo, que se había anunciado que empezarían a principios de junio, se posponen hasta después de la Feria de Pedro Romero, ya que, según explicó ayer el delegado municipal de Obras y Urbanismo, Francisco Márquez, los plazos de adjudicación de los proyectos lo harán imposible. En este sentido, indicó que no será hasta la primera quincena de agosto cuando se concluya este procedimiento y, por lo tanto, hasta entonces no podrían iniciarse los trabajos.

No obstante, ante la proximidad de la Feria de Pedro Romero, que este año está previsto que se inicie la última semana de agosto, señaló que "no vamos a levantar media ciudad a dos semanas de la Feria". Y es que dentro de estas actuaciones, que son financiadas por la Diputación Provincial de Málaga, también se incluyen otras 15 intervenciones en diferentes puntos de la ciudad. Por ello, se propondrá a los adjudicatarios y a la propia Diputación el iniciar los trabajos el lunes después de la Feria de Ronda.

Los trabajos están previsto que se alarguen durante algo más de un mes

En cuanto a la actuación en el Puente Nuevo, los trabajos se espera que solucionen los problemas de saneamientos que se vienen produciendo en uno de los extremos del conocido monumento rondeño, en concreto, el situado junto al Convento de Santo Domingo, lo que provocó que apareciese un aparatoso hundimiento en la calzada. Tal dimensión cobró el problema que saltaron todas las alarmas y fue necesario recurrir a los científicos del Instituto Geológico Minero de España para comprar si se trataba un hundimiento superficial o había afectado a la estructura principal del puente, quedando descartada esta última posibilidad.

Fue entonces cuando se descartó una intervención de urgencia y se optó por mantener los plazos previsto dentro de los proyectos contemplados, aunque en un primer momento se indicó que sería tras la finalización de Ronda Romántica cuando empezarían los trabajos. Una actuación que está previsto que dure unos 40 días, en los que desde el Consistorio ya han anunciado que se verán a cortar el tráfico en este importante punto de circulación, nexo de unión entre ambos lados del casco urbano y que soporta unos 11.000 vehículos diarios, según los últimos datos de tráfico de los que dispone el Ayuntamiento de Ronda.

Por ello, la realización de esta obra será una importante prueba de fuego para las infraestructuras de la ciudad relacionadas con la circulación, y es que en este tiempo se tendrán que tomar caminos alternativos para solventar este corte.

En este sentido, desde el Consistorio explicaron que consideran "prácticamente imposible" el poder realizar los trabajos sin proceder al corte total del Puente Nuevo, ya que el hundimiento se encuentra localizado casi en el centro de la calzada y abarca una amplia zona, por lo que ven poco probable que se pueda mantener la circulación, aunque fuese solo en uno de los dos carriles. Eso sí, aunque el plazo inicial de duración es de 40 días, se espera que dichos trabajos se pueden ver reducidos en su tiempo.