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Merkel critica a los socialdemócratas y señala que el SPD sufre un "desgarramiento profundo"

  • El regreso de Muntefering y la candidatura de Steinmeier 'centran' al partido

La canciller de Alemania, la democristiana Angela Merkel, felicitó ayer a su vicecanciller, el socialdemócrata Frank Walter Steinmeier, por el anuncio de que será su rival en la lucha por el máximo cargo alemán en los comicios de 2009.

Sin embargo, Merkel lamentó la forma precipitada en que el ministro del Exterior fue designado el domingo candidato a canciller por el Partido Socialdemócrata (SPD), lo que calificó como señal del "desgarramiento profundo" que sufre su partido socio en el Gobierno de coalición de Berlín.

Los analistas coinciden en que la renuncia del frustrado presidente de los socialdemócratas Kurt Beck y la designación como sucesor del ex vicecanciller y ministro de Trabajo, Franz Muntefering representa un nuevo capítulo de las luchas internas que sacuden desde hace años la agrupación política más antigua de Alemania. Los socialdemócratas se enfrentan un dilema existencial: seguir siendo los abanderados de los trabajadores o dirigirse más al centro e intentar adaptar el Estado de Bienestar al proceso de globalización mundial.

Con la asunción del dúo Steinmeier-Muntefering vuelve a tomar el timón el ala moderada del partido. Ambos respaldan la continuación de la política de centro de Gerhard Schröder.

A 13 meses de las elecciones, el gran desafío de la nueva dirigencia socialdemócrata, que algunos observadores califican de "última esperanza del SPD", será reconciliar a las dos grandes corrientes internas para impedir que la canciller Angela Merkel consiga la reelección y se alíe como pretende con el Partido Liberal para formar una coalición de centroderecha.

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