Cultura

Coartada para los poetas

  • El homenaje a Rafael de Cózar abre hoy en el CAL la nueva edición de Irreconciliables, con Manuel Vilas y Sofía Castañón como grandes atractivos

Daría para bastante más de una sobremesa el debate sobre por qué en Málaga no ha prendido un festival de poesía con el poderío de la Cosmopoética cordobesa o el Festival Internacional de Granada, muy a pesar de la existencia en la ciudad de instituciones como el Centro Cultural de la Generación del 27, el Centro Andaluz de las Letras (operativas además en toda la provincia) y el Instituto Municipal del Libro; y, más aún, de cierta notable tradición malagueña vinculada a la poesía como expresión natural, desde la fundación de Litoral para mayor gloria de la Generación del 27, pasando por el grupo Caracola y concluyendo en el talento, no precisamente escaso, de los poetas malagueños contemporáneos. Las instituciones antes citadas, así como diversos colectivos de creadores de calidad más independiente, además de otros centros de titularidad cultural como diversos museos, mantienen durante todo el año sus programaciones de lecturas y encuentros con autores (tampoco faltan ciclos de poesía escénica, exposiciones de poesía visual y otras muchas vertientes) con una afluencia cada vez más notoria de escritores de renombre nacional cuya proyección, sin embargo, apenas logra trascender el interés local. Intentos para cuajar un festival de poesía en Málaga de alto copete los ha habido, y muy serios; pero los envites han terminado diluyéndose sin arribar al puerto deseado. Hace cuatro años, el festival Irreconciliables puso en marcha su primera edición con el objetivo de hacer también de la poesía una materia cultural de primer orden en Málaga, con una apuesta de regusto postmoderno que hacía de Irreconciliables, más bien, un festival de lo poético, con espacio para la performance, la música, las artes visuales y demás enjundias. El camino quedó abierto, pero nadie dijo que iba a ser fácil. Por si acaso, la cuarta edición de Irreconciliables comienza hoy martes y se prolongará hasta el viernes con una nómina de autores que incluye a Sofía Castañón, Miriam Reyes, Antonio Jiménez Millán, Guadalupe Grande, José Ángel Cilleruelo, Lara Moreno, Raúl Díaz Rosales, Ángelo Néstore, Isabel Tejada, Almudena Vega y Manuel Vilas, entre muchos otros; y con el apoyo del CAL, la Universidad Internacional de Andalucía, el Instituto Municipal del Libro, el Centro Cultural de la Generación del 27, el Instituto Andaluz de la Mujer, Turismo Andaluz, el Área de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, la Universidad de Málaga, la Fundación Málaga, la librería Luces y el restaurante La Cosmopolita. Así que gente empujando no falta, que digamos, para que Irreconciliables sea el festival de poesía que Málaga merece, si es que lo merece.

Esta cuarta edición comenzará así hoy a las 20:00 en el CAL con un tributo al escritor sevillano Rafael de Cózar, fallecido el pasado mes de diciembre en el incendio de su casa en Bormujos, mediante la inauguración de una exposición que reúne una treintena de obras representativas de la poesía visual que cultivó De Cózar (y que llega a Málaga tras su paso por Cádiz y sevilla). El director del CAL, Juan José Téllez, explicó al respecto que Rafael De Cózar, quien no fue ajeno a prácticamente ningún género literario y que también ejerció de pintor, "destacó como militante de la poesía visual, una forma de expresión que vivió un repunte a partir de los años 60 aunque tenía su origen en las vanguardias". El escritor Manuel Vilas, quien hace un mes presentó en la pasada Feria del Libro su último poemario, El hundimiento, reconocido con el Premio Generación del 27, participará en el homenaje a un escritor imprescindible, influencia decisiva de las tres últimas décadas y ejemplo de la aspiración universal que encierra la mejor literatura andaluza. Después, a las 22:00, el sarao se trasladará al restaurante La Cosmopolita (C/ Denis Belgrano), donde leerán sus poemas Raúl Díaz Rosales, Ángelo Néstore, Isabel Tejada y Almudena Vega.

Cabe lamentar, eso sí, que el festival haya perdido su carácter poliédrico de anteriores ocasiones para presentar una edición centrada, casi exclusivamente, en la lectura, sin conciertos, ni exposiciones (salvo la citada de Rafael de Cózar) ni performances. Más que a una intención de ir al grano, todo apunta a una cuestión presupuestaria (el medio cultural malagueño sabe que los apoyos nominales no se traducen necesariamente, ni mucho menos, en recursos financieros). De cualquier forma, mañana miércoles estarán también en el CAL a las 20:00 la asturiana Sofía Castañón (una de las más esperadas, verdadera femme fatale de la ultimísima poesía española y autora de libros tan deslumbrantes como Culpa de Pavlov), Miriam Reyes, Eladio Orta y Uberto Stabile. El jueves 4 a las 19:00 Fernando Mansilla, David Eloy, Guadalupe Grande, Camilo de Ory y el granadino Antonio Jiménez Millán propondrán una visita poética al Teatro Romano; y ya las 21:00 estarán en el Rectorado de la UMA José Luis González Vera, Daisy Villalobos Leal y José Ángel Cilleruelo. El viernes 5 habrá otra doble cita, con Isidoro Varcárcel a als 19:00 en la Sala Isabel Oyarzábal y Rafael Inglada, Laura Casielles, Martha Asunción Alonso y Lara Moreno a las 21:00 en el Instituto Municipal del Libro. Por poetas, al cabo, que no quede. La coartada ya tiene el mantel extendido.

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