Dos obras del artista neoyorquino Andrés Serrano, de las que una consistía en la fotografía de un crucifijo sumergido en un bote de orina, fueron destruidas ayer en el Museo de Arte Contemporáneo de Aviñón, en el sur de Francia, según informaron fuentes de la institución gala.

La obra Piss Christ, que había sido objeto de críticas en las últimas semanas por movimientos religiosos, fue destruida a martillazos, tras la celebración de una manifestación católica organizada en protesta por la exposición. Así,ayer, en torno a un millar de personas se manifestaron en la ciudad para denunciar el carácter "blasfemo" de la obra.

El ministro francés de Cultura, Frédéric Miterrand, condenó los hechos en un comunicado en el que denunció un "ataque contra un principio fundamental" que pasa por respetar "la libertad de expresión y de creación". La misma obra, que fue presentada por primera vez en 1989, ya había sufrido actos de vandalismo en 1997 con motivo de una exposición en Australia. Diez años después, otras obras del artista con orígenes hondureños y cubanos, cuya notoriedad se debe especialmente a sus fotografías de cadáveres, fueron atacadas en Suecia por personas que se reivindicaban de extrema derecha.