Cultura

Ecos antiguos, voces nuevas: una fórmula magistral

Peña Torre Zambra de Casabermeja. Fecha: 8 de octubre. Cante: Antonio Reyes. Guitarra: Paco Cepero. Aforo: Lleno (unas 120 personas).

La peña Torre Zambra de Casabermeja es una de las peñas más prestigiosas y de más solera no sólo de la provincia de Málaga, sino de toda Andalucía. Siempre se ha caracterizado por atender la tradición y la calidad y su directiva está compuesta por gente joven con ganas de trabajar por el flamenco. Si a eso le unimos el carácter sencillo y acogedor que poseen, encontraremos una velada perfecta.

La propuesta en cuestión consistía en escuchar al joven cantaor chiclanero Antonio Reyes junto al maestro Paco Cepero. Todos los detalles se cuidaron con esmero, desde la iluminación hasta, cómo no, el sonido, en manos de la sabiduría de Antonio Blanco de Cambayá Records.

Antonio Reyes, con esa voz privilegiada, que en ocasiones nos recuerda al Camarón más ortodoxo, empezó con fuerza por soleá, recorriendo los estilos de Alcalá, Cádiz y Jerez, todo trufado de deliciosas falsetas de Cepero que levantaban oles encendidos.

Unos cadenciosos tangos nos llevaron a Granada y Badajoz, introduciendo en el compás con mucho gusto la copla Tus ojos verdes que popularizara la Paquera, así como un fandango de Macandé. La faceta de compositor del maestro Cepero se hizo presente en una bonita creación por alegrías donde brilló la afinación impoluta de Reyes, solucionando a la perfección los difíciles graves.

Llegó el momento solemne de la siguiriya, donde la guitarra de Cepero nos estremeció desde el primer acorde, y la voz de Reyes se acordó de ecos antiguos, queja y rabia a un tiempo, consiguiendo poner a todo el público en pie.

En las bulerías nos deleitó el toque juguetón, que amaga y se recrea, mientras que la voz de Reyes y su dominio del compás, a pesar de tener su personalidad, nos recordó de nuevo a Camarón. No podían faltar los fandangos de Antonio el Calzá y, para terminar, una zambra compuesta por Cepero, donde, sin embargo, más flojo encontramos al cantaor chiclanero.

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