Los versos de Agustín Lara "piensa en mí cuando sufras, cuando llores piensa en mí" adquirieron las noche del 31 de diciembre un nuevo significado cuando Luz Casal los cantó en su reaparición, por sorpresa, en la primera gala de Nochevieja del Teatro Real, que la acogió con gritos de "bravo" y "guapa". Con el pelo muy corto y vestida con el mismo traje blanco con el que aparece fotografiada en la publicidad de la gala que se celebrará el 4 de febrero contra el cáncer, la cantante, que ha tenido que someterse a sesiones de quimio y radioterapia para tratar el tumor de mama que se le detectó en mayo, eligió para su primera actuación desde entonces al Real y Piensa en mí.

"Básicamente -explicó al término de su actuación- he querido estar aquí hoy porque tengo una estrecha relación con el canal ARTE", que transmitió a toda Europa la gala. "No sé si he estado perfecta. Ya veremos al final del concierto cómo me encuentro", añadió muy sonriente y quitándole importancia al entusiasmo que despertó, acompañada por la Orquesta del Real y dirigida por Alejo Pérez, con una vibrante potencia y emoción contenida el tema que ella ha hecho tan popular.

La gala, que será transmitida en diferido por La 2 el día de Reyes, es la primera que programa el Real una Nochevieja aunque este coliseo ya había hecho antes un par de veces para despedir el año El dúo de la Africana, una zarzuela de Emilio Sagi, que fue también el encargado de la dirección artística, muy "navideña" con cortinillas rojas y plateadas que recordaban a los espumillones.

Protagonizado por la soprano María Bayo, el tenor Ismael Jordi, el guitarrista Cañizares, los bailaores Aída Gómez y Christian Lozano y la Compañía de Antonio Gades, el espectáculo, centrado en el repertorio español y piezas clásicas comenzó con la Obertura Cubana de George Gershwin, interpretada al tiempo que en el telón podían verse imágenes de Cuba, de la orquesta y de los camerinos.

María Bayo y el coro interpretaron a continuación la pieza Salida de Cecilia, de la zarzuela de Gonzalo Roig Cecilia Valdés, a los que siguieron la Compañía de Antonio Gades bailando de la ópera Carmen extractos como la presentación del toreador y de Carmen, la guajira y la escena de la tabacalera. El tenor Ismael Jordi cantó de Federico Moreno Torroba Tienes razón, amigo... Noche Madrileña, de La chulapon, y junto a María Bayo Le van a oír, cállese usted..., de Doña Francisquita después del famoso Coro de Románticos a cargo del Coro Intermezzo. Por su parte. Aída Gómez y Christian Lozano bailaron El sombrero de tres picos de Manuel de Falla, Los vecinos, La danza de la molinera, La danza del molinero y Las uvas y Cañizares y su grupo interpretaron su rumba Lluvia de cometas.

El fin de fiesta, con camareros en escena repartiendo copas de cava a los miembros del coro, llegó tras cantar María Bayo Son las mujeres de Babilonia de La corte del faraón y con la Compañía de Gades bailando, con el resto de participantes, las sevillanas de El bateo y el público dando palmas.