La actriz Marisa Paredes lamentó "el momento de enorme confusión" por el que está pasando la libertad de expresión en España en el acto de homenaje que celebró ayer la Acadèmia del Cinema Català y que coincidió con la "espantosa" detención del actor Willy Toledo. "Es horrible que una persona tenga que pasar una noche en el calabozo por decir lo que piensa. Puede que haya ofendido a los católicos, pero es lamentable que lo detengan por ello", señaló y añadió que "no es razonable", "los que mantienen la censura han perdido la cabeza".

Paredes acudió a la capital catalana invitada por la Acadèmia del Cinema Català, que ha querido expresar su reconocimiento a la actriz madrileña, distinguida en la 32 edición de los premios Goya con el galardón honorífico. Este acto forma parte de un homenaje cruzado que el pasado 10 de septiembre llevó a Madrid a Mercedes Sampietro, Gaudí de Honor de la última edición de estos premios.

Marisa Paredes agradeció el reconocimiento de los profesionales del cine catalán y ha hecho un repaso de su trayectoria profesional, en la que ha conseguido una gran conexión con el público "debido quizás a que pongo toda el alma en mi trabajo", según apuntó. Añadió la actriz que ha tenido "mucha suerte" a lo largo de su carrera porque le han ofrecido "grandes personajes" y ha podido trabajar con "directores maravillosos, como Ripstein, Villaronga, Gonzalo Suárez y Almodóvar, que ha sido esencial en mi vida porque su cine tiene mucha fuerza y es una gran ventana al exterior".