La Orquesta Filarmónica de Málaga (OFM) presentó ayer el contenido de su programación para la próxima temporada, lo que significó el debut en estas lides de su nuevo director titular, Manuel Hernández Silva. Y los argumentos que el mismo (que estuvo acompañado por el concejal de Cultura, Damián Caneda; el gerente de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales de la Junta, Alberto Mula; y el gerente de la OFM, Juan Carlos Ramírez) empleó para defender y contextualizar el programa ya eran conocidos, en parte porque él mismo se había encargado de divulgarlos desde que se hizo efectivo su nombramiento. Hernández Silva señaló ayer como objetivos esenciales "ganar abonados y elevar el nivel de excelencia de la orquesta", y lo cierto es que los conciertos señalados en el cartel responden con claridad a este propósito. El programa (que pueden consultar ya en la web de la OFM, www.orquestafilarmonicademalaga.com) presenta un discurso singularmente dirigido al gran público, sin elementos disonantes, que a lo largo de las quince citas señaladas para la temporada de abono se asienta en claves como la música española (con obras de Turina y Falla, cuyo Amor brujo contará con la contribución de la cantaora Rocío Bazán el 10 y 11 de octubre), la latinoamericana (con obras de Revueltas y Ginastera incluidas en un mismo programa con otras de Turina y Falla, en una experiencia que Hernández Silva, amante del flamenco, definió ayer como "de ida y vuelta"), el Romanticismo (de Bruckner a Tchaikovsky), algunos otros nacionalismos europeos (de Sibelius a Smetana) y también compositores postrománticos (Richard Strauss, Mahler, Stravinsky y Shostakovich) con los que Hernández Silva pretende aplicar una cierta tarea pedagógica para acomodar el oído del público al fértil repertorio del siglo XX.

La nómina de solistas invitados incluye al pianista Javier Perianes (que interpretará el concierto de Saint-Säens conocido como El egipcio, que el mismo instrumentista tocó con la Orquesta Joven de Andalucía en el Cervantes el pasado enero, con Hernández Silva en la tarima) y Jesús Reina. El director defendió la inclusión de estos solistas, bien conocidos por el público malagueño, "por su carácter universal y porque, aunque otros pudieran pensar lo contrario, en las ciudades con gran tradición sinfónica el público prefiere disfrutar con sus músicos, y Perianes y Reina son de los nuestros". Eso sí, en el primer programa el pianista invitado será un viejo conocido de Hernández Silva, Konstantin Scherbakov, para el segundo concierto de Rachmaninov. Entre los directores invitados destacan Carlos Domínguez Nieto, Stefan Lano, Daniel Klajner, Ondrej Lénard y Josep Vicent.

Además de la temporada de abono, continúa el ciclo La Filarmónica Frente al Mar en el Auditorio Edgar Neville con cinco conciertos en su tercera edición y directores invitados como Michael Thomas, César Álvarez y Ángel Luis Pérez (Shostakovich, Beethoven, Stravinsky y Brahms son algunos de los compositores recurridos). El ciclo de Conciertos de Cámara celebrará su octava edición en su sede habitual, el Museo Picasso, con un programa ecléctico, que incluye desde un recital del propio Javier Perianes hasta piezas de Schonberg, Piazzolla y Reinecke (a cargo de formaciones bien conocidas por los aficionados, como el Cuarteto Mainake, el Quinteto Aeolus y el Trío Círculo) pasando por la actuación de Accademia del Piacere, con obras de Marais y Forqueray, en un guiño, confirmado por Juan Carlos Ramírez, al ya extinto Festival de Música Antigua de la OFM. Preguntado por la posibilidad de que el ciclo de Cámara termine llenando los huecos que ha dejado la desaparición reciente tanto del citado festival como del Ciclo de Música Contemporánea, Hernández Silva admitió la importancia de programar más allá del repertorio sinfónico, pero al mismo tiempo advirtió de que "no vamos a programar a un determinado compositor por cubrir ninguna cuota. Cuando apuesto por un autor, lo hago porque me interesa y porque lo considero interesante para el público. Y, en este sentido, tan importantes son a la hora de programar Beethoven como la música popular. Para la siguiente temporada, de hecho, estrenaremos obras de compositores vivos en la temporada de abono. Ahora bien, de ninguna manera podemos arrebatar al joven aficionado que acude a ver a la OFM por primera vez el placer de escuchar la Quinta sinfonía de Beethoven. No nos corresponde quitar las Meninas de El Prado".

Más allá de estas propuestas, hay algunas novedades. La OFM recuperará el próximo curso el ciclo en los distritos con conciertos que se celebrarán en el Conservatorio Superior, el Manuel Carra y el Martín Tenllado, con un repertorio integrado por la Cuarta sinfonía de Schubert y la Tercera sinfonía de Mendelssonh. Eso sí, el proyecto de la Academia de la OFM, al que Hernández Silva se había referido como uno de los más ilusionantes tras su llegada a Málaga, queda aparcado (fuentes cercanas a la orquesta apuntaron ayer que los equipamientos y profesores necesarios estaban ya listos, a falta de una inversión de 60.000 euros para transporte y material que tanto la Junta de Andalucía como el Ayuntamiento se han negado a aportar a última hora) en virtud del Programa de Jóvenes Intérpretes, que celebrará su final el próximo 21 de junio en el Auditorio Edgar Neville.

La política de abonos se mantiene respecto al año pasado, con un abono joven para menores de 26 años con un precio de 50 euros para los quince conciertos, con dos filas reservadas en el Patio de Butacas del Cervantes. Y respecto al Auditorio, pues esto es lo que hay.