Cultura

Philip Glass: "La ópera es el rey, la reina y la princesa del arte"

  • El compositor estrena el día 22 en el Teatro Real 'The perfect american', sobre Walt Disney

"La ópera es el rey, la reina, el príncipe y la princesa del arte", asegura Philip Glass. El estadounidense carga en su espalda medio siglo de música: ha compuesto ballets, conciertos para piano, violín y cuartetos, sinfonías, bandas sonoras. Ha trabajado con grandes estrellas del rock y del pop. Pero de todo ello, si tiene que elegir, es con la ópera con la que se queda. "La ópera es texto, movimiento, imagen y música, los cuatro elementos, como la tierra, el aire, el fuego y el agua. Todo está en la ópera. Trabajar en una ópera me permite trabajar en todas las modalidades. Es una especie de alquimia, se pueden tomar cosas ordinarias y transformarlas en oro", explicó ayer en el Teatro Real de Madrid.

Allí, pocos días antes de cumplir 76 años, el 22 de enero estrenará mundialmente The perfect american, la primera ópera sobre Walt Disney de la historia y una de las producciones más esperadas del año en el coliseo madrileño. Con ella regresa al Real, 15 años después de haber estrenado O corvo branco. Y lo hace de la mano de su director artístico, el belga Gerard Mortier, el hombre que cuando estaba al frente de la Ópera de Nueva York le dio el impulso para componerla basándose en el libro del austriaco-estadounidense Peter Stephan Jungk.

"No es un documental, es poesía", repite Glass estos días en Madrid sobre su nueva ópera. En ella aborda los últimos meses de la vida del padre de Mickey Mouse y el Pato Donald. "Disney es un mortal que tiene que enfrentarse con la eternidad. Parece que tiene envidia de sus creaciones y del hecho de que puedan sobrevivirle".

The perfect american es una coproducción del Teatro Real y la English National Opera, en la que se representará en junio. El libreto corre a cargo de Rudy Wurlitzer, la dirección musical está en manos de Dennis Russel Davies y la de escena, en las de Phelim McDermott. El barítono Christopher Purves es el encargado de dar vida al protagonista. Como en el libro de Jungk, Disney aparece retratado como un racista, un misógino y un antisemita. Glass no ha querido evitarlo, pero eso no quita para que puntualice que "no se puede separar a las personas de su entorno". Pese a todo, Walt Disney "fue un gran visionario", sostiene. "Refleja lo mejor y algunas de las peores cosas de su país". "En Estados Unidos, la cultura elevada y la popular están muy cerca la una de la otra y en esto trabajó Disney. Introdujo la música elevada en las películas. Pensemos en Fantasía. Para muchas personas fue la primera ocasión en la que escucharon música clásica", afirma el compositor norteamericano.

Él mismo encaja en esa idea de la combinación de lo elevado con lo popular. Con sus óperas, llega sobre todo a las élites culturales. Pero también ha escrito decenas de bandas sonoras para el cine, como la de El show de Truman (1999), con la que ganó un Globo de Oro, o las de Kundun, Las horas y El sueño de Cassandra. Con ellas llega a un público más amplio, como con sus trabajos con estrellas del pop y del rock como David Bowie, Leonard Cohen, Paul Simon y Suzanne Vega.

Nacido en Baltimore en el seno de una familia de inmigrantes judíos, Philip Glass está considerado uno de los padres del minimalismo junto a Terry Riley y Steve Reich -su ópera Einstein on the Beach fue catalogada como la Biblia del movimiento"-, aunque él lleva huyendo mucho tiempo de esa categoría. Su música se basa en la repetición de secuencias. Y éstas, aunque están construidas con material plenamente diatónico, pierden el sentido y la direccionalidad de la música tonal al provocar una especie de congelación temporal.

Para The perfect american ha buscado las fuentes musicales en Andy Warhol, que también aparece en la ópera. "Busqué los colores primarios de Warhol para basarme en ellos". Y creó "un lenguaje armónico muy contundente con colores primarios pero que a la vez tiene características disonantes". Y mientras ultima sus nuevos proyectos -en Madrid ha concluido tres estudios de piano que había iniciado hace ya tiempo y se prepara para la representación de una nueva ópera en Linz basada en una obra de Peter Handke-, Glass defiende la pertinencia del trabajo sobre Disney. Al fin y al cabo, explica, la ópera hace lo que él hizo muchas veces. "Combina la música con el entretenimiento. Para él hubiera sido algo absolutamente natural".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios