Comienza la temporada musical malacitana con el primer concierto que nos ofreció el Auditorio del Museo Picasso. Volvió el maestro Jordi Savall como una apuesta continuista de la institución malagueña por la música culta de calidad. Una velada, la de antes de anoche, en la que tuvimos la oportunidad de retornar a los orígenes autodidactas del intérprete catalán por el extenso campo de la música antigua. Él mismo lo recordaba en el 2004 con el lanzamiento del disco que publicó en homenaje a la figura de Tobías Hume, continuación del aparecido en 1982.

El programa se exhibió con una veintena de piezas extraídas de The First part of Ayres de 1605 de Hume, en suma a otras relativas a las composiciones inglesas para la viola da gamba. Savall volvió a hacer gala de su interpretación basada en esos elegantes movimientos que siempre despliega frente al espectador, en suma a su sabiduría que le hace corregir cualquier imprevisto inesperado en el lógico discurrir de una interpretación que destaca por irradiar paz y tranquilidad.

El más que evidente dominio técnico, junto a sus oportunas aclaraciones, nos acercó a descubrir un repertorio no tan conocido donde coexisten los golpes de arco que muchos creen propios de la música contemporánea. La expresión en inglés antiguo "Drum this with the backe of your bow" (Golpear con el dorso del arco) en la pieza nº 10 Harke, harke, de la mencionada colección de piezas en la que Savall se basó, es un claro ejemplo del col legno que se describió igualmente en la descriptiva A souldiers resolution.

Por otro lado, la singularidad de The Harp-way Sharp Tuning de Simon Ives, presentada finalmente en la primera parte, cautivó a los presentes tanto por su alternancia de pizzicati de mano izquierda junto al arco, como la efectista utilización de la scordatura.

Finalizó la velada con el conjunto de piezas anónimas The Bag-pipe Tuning, preludiados por una agrupación fuera de programa, y dos muzettes de Marais en gratitud a las grandes ovaciones.