Cultura

Sueños que aún perviven en el papel

  • El proyecto creado en 2003 por los malagueños José Antonio Ruiz y Pilar Villasana, la librería Luces, cumple una década Han vendido más de 1,7 millones de ejemplares

Soñaron con hacer posible dar vida a un gran proyecto partiendo de una iniciativa pequeña y local. Imaginaron un espacio en plena Alameda Principal lleno de miles de libros, una casa abierta a todo aquel que amara tanto como ellos las historias que se cuentan en papel. Y lo consiguieron. Hace una década, el último viernes del mes de mayo, la librería Luces abrió sus puertas para hacer realidad los deseos de José Antonio Ruiz de la Torre y Pilar Villasana. Después de diez años, los socios fundadores aseguran sentirse más honrados que orgullosos por todo lo recibido y encaran el futuro con la misma determinación que el primer día.

"Pensamos que a Málaga le hacía falta una gran librería en el centro, vimos las posibilidades del local y nos embarcamos en ello", recuerda Pilar Villasana. El paso siguiente, lo más arriesgado, fue llenar de contenido aquellas enormes estanterías, de las que ya han salido más de 1.700.000 libros. "Se puso con muy poco dinero y mucha palabra, las editoriales confiaron en el proyecto para vender sus obras a través de nosotros", cuenta José Antonio Ruiz. Así pudieron ofrecer tantos títulos en un espacio tan grande que la mayoría pensó que se trataba de la librería de una gran empresa o cadena. "La gente aún piensa que esto es una franquicia o una cadena, aún nos pregunta dónde está la tienda de Madrid, y todavía no saben que esto es un negocio de dos socios malagueños, no hay más", dice Villasana.

En la tienda tienen unas 80.000 unidades a la venta, de las que 50.000 son títulos diferentes. "Hay unos 30.000 libros de los que tenemos un solo ejemplar y eso es lo que nos da la vida, no los doscientos que podemos vender de Dan Brown", comenta Ruiz. Eso sí, "tener ojo, seleccionar ese uno y mantenerlo, ahí está el arte", añade su socia. Al mes venden entre 5.000 y 7.000 referencias distintas. "Desde el primer momento pensamos que esa era nuestra referencia, no ser una gran superficie de libros", agrega.

Volverían a repetir la experiencia, aunque les haya supuesto horas y horas de trabajo, de dedicación y esfuerzo para seguir avanzando siempre. "Cada día es diferente, no puedes dar por superada ningún tipo de dificultad ni adversidad, debes tener las mismas ganas y energías del primer día", considera José Antonio Ruiz. Para Pilar Villasana, dedicada al mundo de los libros desde hace 43 años, "es absolutamente necesario sentir la misma tensión y satisfacción, si nos falta eso nos vamos al traste".

Un equipo de unas 18 personas amparan a estos socios en una labor que tiene mucho de intuir, conocer y saber escuchar al cliente. "El libro es muy ecléctico y esta librería es popular, no tiene vocación de dirigirse simplemente a un lector exquisito, que también, sino que es más una casa abierta a todos, queremos que muchos lectores con perfiles distintos se sientan a gusto en Luces", afirman los empresarios.

Aunque ahora la crisis ha ralentizado el ascenso vertiginoso de los primeros cinco años, ya son un referente en la ciudad y fuera de ella. "No hay muchas librerías independientes tan grandes como ésta", comenta Villasana, para la que son "parte de un puzle que no se concibe sin el apoyo de los que hay detrás".

Una librería dinámica, que intenta reinventarse día tras día, que tiene la pericia de saber lo que le gusta al que entra, que cuenta con clientes de paso y otros asiduos que eligen un día a la semana para pasear entre las letras tiene aún asegurada, como mínimo, otra década de permanencia. Los sueños aún perviven en el papel, la palabra impresa todavía es capaz de obrar su magia. Frente a las nuevas tecnologías y el libro electrónico, en Luces las páginas, por el momento, tienen el poder.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios