El Museum Jorge Rando acoge desde hoy la exposición temporal Horizontes verticales, una muestra en los que se recorre la intensa relación del artista con la naturaleza. Este ciclo de paisajes, en el que rompe con las directrices de la horizontalidad, está compuesto por 22 óleos y dibujos, según informaron desde el espacio expositivo en un comunicado. Así, añadieron que el pintor "necesita" retornar al lugar donde encuentra intensidad artística y humana: la naturaleza, para presentarla al observador como "un ente propio, reclamando su identidad a través de la conceptualidad de su pintura, no del artista sino de quien la observa". Manchas de color y líneas verticales, un paisaje. El artista se enfrenta "a esa batalla constante entre la mancha y la línea, reflejo de la lucha interior del pintor ante el lienzo en blanco"; todo ello sin olvidarle de la luz.

Jorge Rando hace suya la naturaleza, la siente y la libera creando árboles que no son árboles, profundidades que surgen de la perpendicularidad, manchas de color que estallan como fulgores dispares. Se trata de paisajes en el espacio, han aclarado. Los paisajes de Rando demandan contemplación, "esa aptitud que traspasa la mera visión exterior, la que utiliza para crear y que nos demanda para internarnos en sus nuevos horizontes". El propio artista invita a contemplar los paisajes de pie, erguidos: "dejemos que nuestras raíces nos sostengan como sostienen a los árboles de los bosques y cuando nos tumbemos a descansar, que el horizonte sea vertical".

Es su arte el expresionismo del siglo XXI, el que demanda la espiritualidad en la pintura. "Ese pintor que se siente instrumento del arte en su sueño de tornar en visible lo invisible. Es la propia evolución espiritual del pintor la que puede llevar lo más cerca posible a la creación", finalizaron.