Nueva fase de la senda de inflación

La senda de la inflación de la Eurozona parece haber entrado en los últimos meses de 2023 en una nueva fase. Tras alcanzar la tasa de variación interanual del IPC en 2022 sus mayores registros desde la creación del euro, desde el 3T de este año se ha producido una significativa moderación del incremento de los precios. Entre los factores que han apoyado esta tendencia destacan el efecto base, la mayor estabilidad de los costes energéticos, la normalización de las cadenas de valor globales, y la desaceleración del consumo privado y de la inversión empresarial, en su caso afectada por el endurecimiento de las condiciones financieras.

Así, por primera vez desde julio de 2021, las 4 principales economías de la Eurozona han registrado en el último mes una tasa de inflación general inferior a un 4,0% interanual, situándose el avance interanual del IPC general preliminar de Francia en un 3,4% (-0,6 pp respecto a octubre), de Alemania en un 3,2% (-0,6 pp) y de Italia en un 0,8% (-0,9 pp). La tasa de inflación general de nuestro país retrocedió a un 3,2% interanual en noviembre (vs. 3,5% en octubre), determinada en gran medida por el menor encarecimiento de los alimentos y la caída de los precios de los carburantes y de los paquetes turísticos.