El microscopio
Una sentencia imposible
Afavor, en contra, abstención. Incluso un oportuno retraso a la hora de llegar a votar. El voto de Cassá en las comisiones de Urbanismo del ayuntamiento de Málaga es un misterio oculto al común de los mortales. Un arcano insondable al que solo unos pocos elegidos pueden acceder y no siempre transmitir. Así lo ha entendido doña Rosita, persona educada y dada a la observación y el diálogo, que contempló recientemente como ¡hasta en dos ocasiones! era rechazada la propuesta municipal de hacer un coworking de oficinas en la esquina del puerto. Primero por el retraso del concejal a la hora de votar (seguramente abducido por una nave de extraterrestres fascinados por su coleta) y luego por su voto en contra (los extraterrestres le hicieron saber su malestar porque no se contemple la implantación de un centro de nuevas tecnologías para el aterrizaje de naves alienígenas).
Por eso, doña Rosita ha visto con buenos ojos la reunión a puerta cerrada del regidor municipal con el abducido concejal. Una reunión en la que, como le ocurrió al presidente americano en Independence Day, nuestro alcalde se ha valido del contacto telepático con el concejal para conocer los deseos de los invasores, negociar con ellos y lograr que el edil cambie su voto. Hoy, en Cuarto Milenio, nos adentraremos de la mano de nuestra médium doña Rosita en las oscuras negociaciones que han tenido lugar en la casona del Parque y de las que hasta ahora nada ha transcendido tras ser clasificadas como alto secreto. Clasificación que ya mereció la explicación de su anterior voto en contra. Interpretaremos la reacción de Pérez, líder de la otra facción de la oposición galáctica y molesto porque el alcalde no negociase con él una plaza de parking para su flota interestelar; y analizaremos la propuesta de Adelante Málaga, disgustada por no dedicar ese espacio a un centro de promoción de los verdiales. ¿Escondía dicha propuesta un maquiavélico plan para hacer explotar los cerebros de nuestros visitantes galácticos (y de camino la de sus colaboracionistas del gobierno municipal) con la diabólica combinación del sonido de panderos, guitarras, violines y platillos, como ya nos avisaron en Mars Attack!? ¿Ha pactado don Francisco de la Torre con los invasores el secreto de la vida eterna para poder presentarse a la alcaldía hasta que nos concedan una Expo? Esta noche, la respuesta a estas y más preguntas en Cuarto Milenio.
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