EL Getafe me trae muchos recuerdos. Ahí perdí mi primera y única liguilla de ascenso, pero evidentemente no vamos a tomarlo como argumento del artículo. Si lo podemos hacer con el propio Getafe... Sin duda, un club donde nos tendríamos que mirar.

Uno vive y necesariamente necesita jerarquizar virtudes. Decir éstas son las virtudes que rescato en los demás y quisiera para mí. Las que respeto, las que valoro. A mí el deporte me dio ese parámetro. Yo aprendí por la competición que la generosidad era mejor que la indiferencia. Aprendí el valor de la significación del coraje y la importancia del esfuerzo. También aprendí lo trascendente de la rebeldía. Son los tres o cuatro elementos con que yo después traté de orientar mi vida deportiva y personal. No necesariamente tienen que ser ellas las elegidas para los demás, pero sí es indispensable que uno sepa cuáles son las virtudes alrededor de las que quiere vivir y formar su entorno.

Yo no concibo el fútbol sin protagonismo. Tengo una atracción exagerada por la victoria y el protagonismo es el mejor camino para acercarse a ella. Mi intención siempre es ser protagonista. Creo en eso, me hace sentir seguro. Es más, me siento muy incómodo con la especulación. Desconfío porque la especulación siempre me defraudó, me golpeó. Jamás pensaría un partido así, no protagónico, y en el que el equipo no tenga el objetivo de situarse en campo contrario. En cualquier cancha y frente a cualquier rival. Hay un empalme más armónico entre la pretensión y la posibilidad. Creo en los líderes. Son indispensables, porque todos necesitamos ser conducidos. Los momentos difíciles exigen una figura referencial. Dicho todo esto, yo veo al Getafe como me gustaría que sea mi Málaga, nuestro Málaga: protagonista en todos los campos donde vayan.

Del partido de ayer, vamos para adelante. Defensivamente, mejor. Creo que los jugadores salieron más comprometidos con la parcela defensiva. Y en ataque, igual que siempre. Cada vez que salimos a la contra le damos una puñalada al contrario, a veces mortal y otras no. Esta vez sí que lo fueron, pero no nos podemos fiar de estos ataques y tenemos que estar tan serios en defensa como hoy. Quiero un Málaga compensado y vamos camino de ello.