La esquina

José Aguilar

jaguilar@grupojoly.com

Juanma se opone a la oposición

"Como sé que te gusta el arroz con leche, por debajo de la puerta te echo un ladrillo", decía, jocoso, Romero (IU)

El diputado malagueño Antonio Romero (IU) se inventó, en un Parlamento más brillante que el actual, un refrán apócrifo muy jocoso: "Como sé que te gusta el arroz con leche, por debajo de la puerta te echo un ladrillo". Quería ridiculizar la práctica de los gobernantes, entonces socialistas, de no contestar a las preguntas de la oposición en las sesiones plenarias. Los consejeros cuestionados sorteaban las preguntas incómodas yéndose por los cerros de Úbeda. Vamos, lo que hace Pedro Sánchez ahora cuando le preguntan por los muertos del coronavirus, así en el Congreso de los Diputados como en las ruedas de prensa y en las entrevistas. Echa muchos ladrillos por debajo de la puerta.

También lo viene haciendo Juanma Moreno. Si Susana Díaz la pregunta por su promesa de conceder una paga extra a los sanitarios en recompensa por su dedicación durante la pandemia, el presidente de la Junta le habla de los recortes y precariedades que ella perpetró cuando ocupaba el mismo cargo. Si Teresa Rodríguez le interpela por los 6.000 profesores que va a contratar la Consejería de Educación y si son los 6.000 habituales o se trata de contratados adicionales, él replica con lo mal que estaba la Educación con anterioridad a la llegada del -presunto- Gobierno del cambio. Mi compañero Ignacio Martínez ha contado con rigor y en detalle este argumentario escapista de Juanma. Una variante del tradicional "y tú más": el "y tú -antes- más". Va flanqueado por dos hilos discursivos complementarios: las iniciativas de los diputados progubernamentales a la mayor gloria del presidente interpelado ("Me alegro de que me haga esta pregunta") y el desvió sistemático del tiro hacia/contra el Gobierno de la nación. Moreno está menos creíble y centrado dando cuenta de su gestión en la Junta que criticando al Gobierno de España. Hace oposición a sus oponentes y a Pedro Sánchez.

Ninguna de las dos cosas son estrictamente competencia suya. Las sesiones de control del Parlamento andaluz están pensadas para que los legisladores autonómicos vigilen, escruten y pidan explicaciones a los gobernantes autonómicos, no al revés. La Junta tiene que responder de lo que hace ella, no de lo que hacen hoy otros en Madrid o hicieron ayer otros en Sevilla.

Cierto que, en sus días, Chaves practicó lo mismo con Aznar y Susana con Rajoy. Ahora reciben su propia medicina. Mal hecho, hoy como ayer. Unos y otros.

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