SI de algo me alegro del partido de ayer es que por primera vez en los 15 años que llevo en España veo al Málaga jugando como un equipo grande y al Atlético de Madrid como uno pequeño. Es inexplicable cómo un equipo con tanta solera y que dice ser el tercer o cuarto mejor equipo de la Liga no sea capaz de jugarle de tú a tú al Málaga. Esto es para alegrarse; ya algunos de los grandes nos respetan, cuando hace un par de años era inimaginable.

Hablemos un poco del partido del sábado. Desde el minuto 2 ya vi que se tornaría muy complicado porque superar una defensa de 10 jugadores metidos en el borde del área es casi imposible. Y así pasó, no pudimos marcar. En estos partidos es cuando tienen que entrar las individualidades para poder desequilibrar el encuentro. En este apartado me gustó en la primera parte Buonanotte, que lo intentó de todas las maneras posible y se sacrificó en defensa, pero las continuas faltas hacían imposible poder desbordar. También me gustó el descaro de Isco, pero lo obligaban a desbordar muy lejos del área.

En los encuentros como los de ayer es cuando se tiene que ver a un jugador como Santi Cazorla, pero el día de ayer no fue el suyo. Por cierto, hablando de Cazorla no me preocupa que no esté haciendo los mejores partidos, ni me preocupa que este fallando los pases, no me preocupa que no esté sacando bien las faltas. Lo que realmente me inquieta es que no se le ve jugar con una sonrisa en la cara, con la alegría con la que desarrolla su juego, y eso en un jugador como él es fundamental.

En la segunda parte hubo más de lo mismo pero con el Málaga un poco más cansado y el Atlético más adelantado. Quiero resaltar durante ese tiempo el trabajo incansable de Rondón, un futbolista que está siendo criticado, bajo mi punto de vista, sin razón. El venezolano se cansó de moverse por todo el frente de ataque, cayendo a banda constantemente para tratar de abrir la maraña defensiva que había creado el Atlético, pero lo que no se le puede pedir es que este en todos los sitios. Él no puede caer a banda y rematar, él es un jugador que depende de los balones que le lleguen y no le están llegando, porque en la primera parte de media ocasión que tuvo se sacó un remate de cabeza espectacular.

Con respecto a los cambios realizados por Manuel Pellegrini, creo que estuvieron correctos, lo que eché de menos es intentar hacer algo diferente para poder ganar el partido, como poner dos jugadores por las bandas o quedarnos con tres defensas. Algo distinto, porque si en 70 minutos con lo mismo no pudiste hacer daño, creo que es lógico buscar el intento de otra cosa.

Bueno, al menos nos queda el martes y ahora nos podemos centrar plenamente en la remontada. Quieras o no, en el subconsciente de todos está este partido contra el Real Madrid, que puede ser histórico si somos capaces de pasar la eliminatoria. Este Málaga nos sigue ilusionando porque nadie daba nada por nosotros en la Copa del Rey cuando se conoció el rival y ahora tenemos asustados a más de uno. En nuestro fuero interno sabemos que 90 minutos con La Rosaleda llena y volcada con su equipo son muy largos y sólo estamos a un gol del triunfo. Lo digo por experiencia: cosas más difíciles se vieron en este campo.