Negro y en bidones

Se trata de determinar el pagano de la factura y la respuesta se escribirá negro sobre blanco: nadie

Los terrenos de la antigua Repsol siguen contaminados. Parece que hubo un tiempo en el que no lo estuvieron, pero como el tiempo todo lo cambia, ahí que han vuelto a estarlo. El sector inmobiliario es un sector tóxico y estos suelos tan apetecibles parece que dan asco en el fondo.

La limpieza tiene cierto grado de subjetividad. El baño de los domingos se ha hecho de comunión diaria y los parámetros que antaño determinaban que un suelo estaba limpio, hoy son inaceptables. Repsol descontaminó su propiedad antes de venderlos y hay que suponer que lo haría bien. La calidad del trabajo fue certificada por un laboratorio homologado y verificada por la Junta de Andalucía. Como se supone que nadie compra a sabiendas un producto en mal estado, antes de pagar lo que pagaron, los compradores debieron hacer los mismo. Y el Ayuntamiento debió darle su visto bueno con la modificación del planeamiento pertinente, estudios ambientales Dios mediante. Quince años después, Europa es más limpia y las exigencias para construir en cualquier suelo, mayores. Cosas de estos años. Igual que cambian los límites de contaminación, te bajan los precios de la vivienda y te devuelven el aumento de edificabilidad que habías vendido, haciéndote propietario de un solar contaminado en vez de un parque. Por eso es bueno tener memoria. El Ayuntamiento ya ha comenzado a hacerla para recordar quiénes fueron los propietarios del sector que pudieron contaminar el suelo. Negro y en bidones. Se trata de determinar el pagano de la nueva factura y la respuesta se escribirá negro sobre blanco: nadie. Repsol alegará que ella ya descontaminó con el visto bueno de todas las administraciones. El grupo inmobiliario Comarex, en liquidación desde el año pasado, no está para que le pidan explicaciones. A la Sareb le dieron los suelos así, exactamente igual que se los endosaron al Ayuntamiento. Y los promotores a los que les interesen los querrán limpios de problemas e hidrocarburos antes de pagar un euro. Sucios no les valen. Como ha manifestado el concejal de medio ambiente, "la solución puede ser compleja" y seguramente lo será hasta que el precio de las ventas de las viviendas mejore. El suelo está contaminado y nadie sabe quién lo descontaminará. Puede que en breve se plantee que debe hacerlo la Junta. El histórico de los problemas de esta ciudad dice que se la echa en falta en este embrollo. Si no, al tiempo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios