La esquina

José Aguilar

jaguilar@grupojoly.com

Pedro, insomne por Pablo

¿Era sincero cuando ofreció ministerios a Podemos o lo es cuando dice que no dormiría si los tuviera? Mintió las dos veces

En julio le ofreció la vicepresidencia a Irene Montero y tres ministerios más a Unidas Podemos como la mejor solución para España. En septiembre, anteayer, aseguró que no podría dormir por las noches siendo presidente de un Gobierno en el que Unidas Podemos tuviera en sus manos Hacienda, Energía o Seguridad Social. Como el 95% de los ciudadanos, añadió (las cuentas no salen: se supone que al menos el 15% de los ciudadanos, los que votaron a UP, sí quieren ministros de UP).

¿Cuándo mintió Pedro Sánchez? ¿Cuando proclamó a Podemos su socio preferente y quiso compartir con ellos un gobierno de coalición o cuando dice que la sola idea de cogobernar con los podemitas le quita el sueño? No le den muchas vueltas: mintió las dos veces. Está en su naturaleza. La relación de Sánchez con la verdad es, digamos, acomodaticia y flexible. Se concreta en función del momento. Varía según sirva a un objetivo que es lo único rígido e indiscutible. Permanecer en el poder.

Es igual de sincero cuando pide la abstención de PP y Ciudadanos por responsabilidad y sentido de Estado para su investidura como presidente del Gobierno que lo era cuando su No es no a la investidura de Rajoy en circunstancias semejantes. Era sincero cuando ofreció a Quim Torra un diálogo entre iguales con su falta de límites y su relator que cuando amenaza a Rufián con volver a aplicar el 155 en Cataluña. Tan sincero cuando festeja que los socialistas catalanes gobiernen con Ada Colau en Barcelona como cuando, anteayer, ponía a Colau como causante de su primer terrible insomnio por haber llamado, la alcaldesa, a manifestarse si los independentistas presos son condenados. Igual que lo será si después del 10 de noviembre el panorama político resulta ser parecido al actual y necesita rescatar la idea del gobierno progresista. Entonces ya no importará la inexperiencia de Unidas Podemos ni su radicalismo que ahora no le deja dormir por las noches.

Casi inspiró ternura en sus divagaciones insomnes de La Sextaal afirmar que comparte con los ciudadanos el hastío y la frustración por la inestabilidad que sufrimos. Y lo dice sin pestañear el principal agente -no el único, por supuesto- de inestabilidad de este país en los últimos cuatro años. El primer responsable de que no hubiera gobierno estable en 2016 y no lo haya en 2019. El culpable de que tengamos que volver a votar. Si votamos...

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios