EL domingo por la mañana Javi Gracia desayunaba con la venta de Vitorino Antunes al Dinamo de Kiev. Según la versión del Málaga, seis millones de euros más dos opcionales si se cumplen bonus tienen la culpa. Por el nivel del portugués, una excelente venta de ser ciertas esas cifras. Comprado por la quinta parte hace año y medio, tras 69 partidos se ha revalorizado en La Rosaleda sin que su paso haya deslumbrado. Por hacerse una idea, el club ucraniano paga el dinero por el que el Málaga compró a Monreal hace tres años y medio. El nivel de uno y otro no es el mismo. Ni de lejos.

La realidad del Málaga obliga a vender, insisten sus responsables. Camacho y Darder saldrán con alta probabilidad en verano, por los dos se pueden recaudar otros 20 millones. Y así, pieza tras pieza, se va tapando un agujero tras otro sin que se atisbe el final del proceso de regeneración, un bucle infinito. Se ha hablado mucho de la innegable inversión del jeque para darse un paseo por la Champions y ser virtualmente uno de los cuatro mejores equipos de Europa. Así fue. Pero, como se publica hoy en estas páginas, ya van recuperados casi 80 millones sólo con ventas de esos jugadores de la Champions. En la era de Asensio, Roldán y Mendoza se vivió un proceso similar. Y en nombre del equilibrio de cuentas se justificó todo. Ya sabemos cómo acabó.

La extraordinaria campaña liguera del Málaga a estas alturas de temporada tiene es un cocktail de riesgo, osadía, acierto y, también, algo de suerte. La mediapunta malagueña que tanto orgullo produce podía estar perfectamente fuera del club. Samu García se le firmó a última hora al inicio de la temporada anterior cuando con 23 años estaba en la disyuntiva de qué hacer con su vida, a Samu Castillejo se le ofreció rescindir su contrato y al final se le amplió por menos del cuantioso que tenía firmado de la era de vacas gordas y la progresión de Juanmi se había detenido hasta involucionar.

La certera elección de Javi Gracia, el atrevimiento de éste y la carestía han propiciado esta situación. Pero hay que ser conscientes de que conseguir estabilidad así será muy complicado. Igual se puede jugar la Europa League que pelear por el descenso.