Las sevillanas ni siquiera son un cante chico. "Cante con copla similar a la seguidilla castellana. Canción folclórica aflamencada que tiene la finalidad de acompañar al baile del mismo nombre", define Blas Vega y nada más añado yo. Quiero decir, que no es de los monumentales palos del flamenco ni de los trascendentes, aunque sí festero, arropador y divertido. Canal Sur nos ha regalado desde hace meses noches de sábado dedicadas a las sevillanas y, con toda simpatía y respeto, admito que la cosa no da para más. Hemos soportado sevillanas profesionales, de aficionados, femeninas, masculinas, de peques, de mayores, de aquí, de allá... Hemos aplaudido educadamente el programa. Pero, como pasó con La Copla, el resultado es visiblemente negativo. No avanzamos nada, nada se corrige, nada se mejora, nada se critica. Siguen los mismos ripios, los mismos mohines, los mismos y repetidos falsos sentires. Y yo me pregunto: ¿Qué nos queda a cada uno de nosotros de estas insoportables por abrumadoras sevillanas?

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios