¡Al carajo!

Si se llegan a dar cuenta los jóvenes guardias rojos, se quedan sin dibujantes

Al carajo Andy Warhol! ¡Al carajo el Pop Art! ¡Vivan los cuadros de gitanas y toreros! Tampoco. Los de gitanas son apologías de la discriminación étnica. Y los de toreros, incluso con el maestro en la enfermería, inaceptables para un amante de los animales. En resumen ¡Viva las marinas, los bodegones (siempre que no se expongan en países azotados por el hambre) y los bosques desnudos de cualquier presencia humana! Cualquier otra apuesta puede ser objeto de las más furibundas críticas de un espectador ofendido. El autocensurado cartel del Festival de Cine Fantástico de la Universidad de Málaga ha sido la última víctima de la Nueva Revolución Cultural. Un gato de la suerte que alza un ejemplar del Libro Rojo de Mao bajo el sol naciente imperial japonés y sobre las masas del Ejército Popular chino, que muestran los suyos mientras portan banderas en las que el gato empuña un cuchillo ensangrentado, una tipografía de caracteres pseudo cirílicos, que alguien puede entender como una evocación de la extinta Unión Soviética, y una impresión bicolor en rojo desvaído y negro, sobre ese blanco rosaceo característico de la cartelería revolucionaria. Una mezcla tan terrorífica que llega a dar risa. Un genial sin sentido acorde con la ceremonia de inauguración del festival. Colofón adecuado de carteles anteriores en los que nadie vio la petición de voluntarios como una evocación del maoísmo más atroz. O del imperialismo soviético y chino que acabó en la guerra de Corea y tres millones de muertos. El cartel ha empleado el sol naciente y eso es inaceptable. La UMA es acusada de fascista y el Vicerrectorado de Cultura se autocensura modificando el cartel y organizando un acto de desagravio seglar en forma de conferencia a la que, se supone, asistirá el diseñador de rodillas y con un capirote en el que se describirá su ofensa. ¡Al carajo Obey! Encalemos el Soho y cerremos el Vicerrectorado. La corrección política ha escrito el discurso y "los intelectuales deben ir al campo para ser reeducados". Mientras, en la Escuela de Arquitectura de Granada se puede visitar la exposición De las manos negras al sol rojo. Los carteles de la Revolución Cultural China. El sol naciente aparece en muchos de ellos, sólo que en las antítesis ideológicas, el sol rojo sobre un fondo blanco muta en blanco sobre fondo rojo. Si se llegan a dar cuenta los jóvenes guardias rojos, se quedan sin dibujantes.

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