Sentimiento malaguista mil y una historias

Basti

Los hombres importantes han de ser más regulares

PERMITIDME que arranque la columna diciendo que los Málaga-Atlético de Madrid son muy especiales para mí. Debuté contra los rojiblancos en Primera. Y vaya, ese día nos chocamos con Jimmy Floyd Hasselbaink. Perdimos 2-3.

Dicho esto, vi un buen Málaga en la primera parte en líneas generales. De inicio, me gustaron mucho los bajitos más Rondón. Hubo momentos de calidad y con llegada arriba. Pero en frente había un Atlético muy ordenado, muy intenso, sobre todo en el centro del campo. Y con mucha agresividad, demasiada. El Málaga tocaba bien la pelota, sin tantas ocasiones como es habitual en casa, pero bien peligroso fue el cabezazo de Rondón con palomita de Courtois. Luego hubo llegadas, poco más.

Llevó la iniciativa y eso me gustó. Cazorla, en el medio, con Toulalan (otra vez destacado el francés), estuvieron bien. De Toulalan, hay que decir que es uno de los destacados, como todas las semanas. Pero el equipo es anárquico, juega bien y se diluye. En ello tiene mucho que decir Cazorla, al que el centro del campo rival le tapó los huecos. El asturiano no me transmite que esté cómodo en el campo. Me lo dice su rostro, sus brazos abiertos cuando falla. Su técnica es muy alta como para mandar una falta tan arriba como la de la primera mitad. En cuanto a otro señalado, Rondón, a pesar de que se habla mucho de que no marca, insisto en que hace un trabajo muy bueno para el equipo. Y no le llegan buenos balones para marcar.

El Atlético tuvo pocas oportunidades, poco más de las de Diego y el tiro al poste, y le falta mucho camino. A cada paso Toulalan me gusta más, pero Weligton también estuvo fino. Tuvo buena conjunción con Demichelis, ya que es más rápido al cruce, y peleón. Hay que recuperar a este jugador, que llevaba mucho tiempo fuera. Me alegro mucho por él.

En la segunda parte, más por el bajón del Málaga, el Atlético estuvo algo más cómodo. No sé si acusó el esfuerzo de Madrid, pero no veo que últimamente el Málaga llegue fino al final de los encuentros. El Málaga se fue del partido y, de hecho, no chutó. No hacerlo en casa es indicador de que no atacas. El equipo tiene que perder esa intermitencia, que sean más regulares sus hombres importantes. Duda, por ejemplo, entró y no se le vio. Tampoco a Van Nistelrooy, que no lo vi muy intenso, sin pretender cambiar lo que había. Veo que lo que transmite el entrenador no llega. El Málaga es un equipo alegre y de repente desaparece.

La Copa puede ser clave. Eliminar al Madrid daría una moral brutal. Si cae, los ánimos para el Sporting serían otros. Y con esta media en Liga no da para llegar a los puestos deseados. El Málaga, por qué no, le puede volver a jugar de tú a tú al Madrid y ganar de uno para revertir la eliminatoria.

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