La llegada de un nuevo Gobierno dispuesto a contentar a casi todo el mundo en poco tiempo nos permitirá en las próximas semanas visualizar si hay variación radical de escenario más allá de las medidas sociales. Por ejemplo, con las infraestructuras, el Ministerio de Fomento que Pedro Sánchez ha concedido a uno de sus principales valedores en el PSOE, José Luis Ábalos, para que pueda poner en marcha obras por toda la geografía, gracias a los presupuestos, más alegres en inversiones, que diseñó el PP con el objetivo de llegar a 2020.

De momento, la Plataforma por el Tren Litoral ya le ha dado un toque de atención al nuevo Ejecutivo. El anterior ministro se había comprometido a presentar las alternativas al trazado y las soluciones técnicas para unir Málaga con Marbella y Estepona por ferrocarril. El Gobierno de Rajoy sólo contemplaba la ampliación del Cercanías mientras que la plataforma, con un PP entonces a la defensiva, sacó adelante un documento en que defendía que el tren debería ser competitivo con el coche. O lo que es lo mismo: el Cercanías era insuficiente. Veremos si populares y socialistas intercambian ahora sus papeles.

Fomento, con la oposición de empresarios y colectivos, incluido el propio alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, tampoco aceptó modificar el trazado del baipás en Almodóvar del Río, para el llamado AVE barato a Sevilla. La curva de la conexión prevista obliga a una fuerte reducción de la velocidad y los socialistas entonces estimaban que se perdían de forma innecesaria más de un cuarto de hora. Íñigo de la Serna hizo oídos sordos y defendió que con la declaración de impacto ambiental ya aprobada, replantear el proyecto significaría un retraso de cuatro años. Argumento suficientemente disuasorio para que el regidor de la capital templara sus manifestaciones desde entonces. Pero el PSOE y su diputado Miguel Ángel Heredia fue bastante belicoso. Ahora veremos.

Es cierto que un Ejecutivo en precario como el actual puede lanzar cualquier brindis al sol. A ningún partido, si quizá exceptuamos al PP, inmerso en un debate que va más allá de la sucesión de Rajoy, le interesa que el PSOE se consolide y recupere el crédito de sus antiguos votantes gracias a la acción del gobierno. Así que a la vuelta de vacaciones todos intentarán que este efecto efervescente y la novedad, tras el agotamiento del gabinete anterior, de los actuales mandatarios se prolonguen el menor tiempo posible para que unas elecciones clarifiquen el panorama.

Curiosamente, el proyecto para la gran ampliación del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) resucita la gran asignatura pendiente: sus deficientes comunicaciones. Hasta ahora la Junta le arrojaba el Cercanías al Gobierno Central y éste le replicaba con el Metro. Ahora no hay dos tejados para lanzarse la pelota y la una y el otro quedarían retratados sin dejan esta casa sin barrer.