La cuarentena británica arruina al turismo

Andalucía se ve arrastrada por una gestión regionalizada de la pandemia que se demuestra inútil y que ha deteriorado la imagen de España

La decisión del Gobierno británico de imponer una cuarentena de 14 días para todos los viajeros que lleguen a las islas procedentes de España representa la peor noticia posible para el sector turístico andaluz. La imposición se ha tomado justo en la víspera del comienzo de un mes de agosto en el que se habían depositado importantes expectativas para amortiguar el impacto que está causando la pandemia del coronavirus. Andalucía recibió 32,5 millones de visitantes que dejaron más de 21.000 millones el año pasado. Ese 13% que representó en el PIB ahora se difumina. Los rebrotes en las últimas semanas, sobre todo, en el norte y el este del país sirven en bandeja este cierre encubierto y unilateral de frontera. Una solución que despeja el problema pero no lo afronta. Es lamentable que antes de tomar una determinación tan drástica el Ejecutivo de Boris Johnson no haya querido explorar con el español otras posibles alternativas, como los test antes de volver, paradójicamente, de un territorio más seguro y con menos índice de contagios que del que proceden, como es el caso de Andalucía. La comunidad, una vez más, se ve arrastrada por una gestión regionalizada de una pandemia que se demuestra inútil. Porque es la imagen de España en su conjunto la que se ha deteriorado y las gravísimas consecuencias económicas del descontrol del virus en algunas autonomías y su repercusión en el resto saltan a la vista. Ahora se pueden suplicar corredores de seguridad para convencer a las autoridades del Reino Unido o negociar que se levanten las restricciones, al menos, en Canarias y Baleares, con el argumento de su insularidad. Pero ya es tarde. Por cierto, tampoco la Junta inyecta seguridad al sector turístico con un debate de casi una semana sobre el cierre o no del ocio nocturno. Los británicos representan más del 23% del total de extranjeros que recibe Andalucía y su principal destino es la Costa del Sol. Viajan en verano, se alojan la mayoría en hoteles y buena parte de los 69 euros que se gastan cada uno de los nueve días que, de media, prolongan su estancia, es para los bares y restaurantes locales. Si no se alcanza un acuerdo pronto, este golpe será muy difícil de encajar.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios