La cooperativa de segundo grado Suragro, que integra a más de 2.500 socios, alegará en los próximos días el documento de diagnóstico del Plan General de Ordenación Urbana de Ronda (PGOU) para evitar una recalificación que supondría una especial protección ambiental de más de 16.000 hectáreas actualmente dedicadas a la explotación agrícola y ganadera.

Según informó el colectivo, que agrupa especialmente a olivareros y cerealistas, además de algunos ganaderos, "pretendemos evitar lo que ocurrió tras la aprobación del vigente plan urbanístico, que produjo una notable afección a estas explotaciones", declaró ayer Manuel López, el presidente de Suragro.

Éste indicó que esta figura de protección incluida en la propuesta hecha por el equipo redactor, dirigido por el arquitecto Manuel Ángel González Fustegueras, "es muy reciente, pero significa una protección casi similar a la que tienen los parques naturales, la que tienen los ríos y las vías pecuarias, o la propia Hoya del Tajo, algo que resultaría nefasto para nuestros intereses".

Según Suragro, la propuesta hecha por Fustegueras afectaría a zonas agrícolas como Ronda la Vieja, Los Villalones, Serrato, Montecorto, Cuevas del Marqués o el Cortijo Panta. "De calificarse así esas zonas, se nos prohibiría cultivar libremente", añadió el presidente de la cooperativa; de hecho, esa figura de protección limita por ejemplo la forma de cultivar los cereales, pero también el uso de alambradas o el de determinados productos agrícolas.

La cooperativa ya ha recogido 1.000 firmas que presentarán al Ayuntamiento "como sugerencia" a ese primer documento de trabajo. Una alegación conjunta que, de no ser atendida, podría conllevar otras acciones. "No descartamos cortes de carretera o incluso fuertes manifestaciones con nuestros tractores", advirtió el representante de los agricultores, al tiempo que se mostró "muy molesto" por la nula atención a sus demandas.

El Ayuntamiento, que prometió a los afectados que podrían plantear sus ruegos y sugerencias al equipo redactor, todavía no ha propiciado el encuentro entre las partes, "cuando los empresarios de la ciudad o los colectivos ecologistas sí han podido ya hacerlo, algo que creemos injusto", denunció Manuel López.

En el Consistorio, la concejalía de Obras y Urbanismo insiste en que los documentos de trabajo que hay sobre la mesa "no son definitivos" y están sujetos aún a muchas modificaciones antes de que esté acabado el documento final de planeamiento.