El pueblo de Pizarra mostró ayer su apoyo a la familia de las dos víctimas mortales del accidente de tráfico que tuvo lugar en la madrugada del pasado domingo acudiendo de manera multitudinaria al entierro de los dos vecinos que eran padre e hijo. El funeral se celebró por la mañana en la localidad y las muestras de dolor de los asistentes fueron continuas. El accidente, que aún está siendo investigado por la Guardia Civil, se produjo sobre las dos de la madrugada al chocar la motocicleta en la circulaban los dos pizarreños, de 41 y 13 años, con un caballo que deambulaba por la carretera A-355 que conecta Coín con Marbella. El hombre y su hijo regresaban de disputar o ver un campeonato nocturno de ajedrez en el municipio de Ojén cuando se encontraron al animal en medio de la vía contra el que impactaron perdiendo su vida en el acto.