La alcaldesa de Manilva, Antonia Muñoz (IU), responde con la gestión económica que ha permitido al Consistorio, entre otros logros, abonar las nóminas de los empleados municipales o pagar cerca de 1 millón de euros a los proveedores, a los que la critican por los casos de pagos privados con fondos públicos que estallaron a comienzos de enero. Los logros económicos y el descubrimiento del uso fraudulento de los fondos han surgido tras la puesta en marcha en 2007 de un plan de ahorro.

-¿Cómo surgió la idea de emprender el plan de ahorro?

-Fue una necesidad para garantizar la salud del Ayuntamiento. Cuando hubo mucho dinero en las arcas municipales, gran parte del cual procedió del boom inmobiliario, los concejales no fuimos capaces de pensar qué vendría mañana. Pensamos que todo iba a seguir igual. El plan surgió para ver cuáles eran las necesidades y prioridades del Ayuntamiento después de una época de tenerlo todo. En 2007, por ejemplo, se debía al Patronato de Recaudación cerca de 4 millones de euros.

-El plan ha servido para destapar casos de pagos fraudulentos con fondos públicos. ¿En qué punto se encuentran las investigaciones?

-A la primera que le duele que pasen estas cosas es a mí. Es bueno que estos fallos, que nunca se deberían haber producido, se hayan detectado. Que alguien los haya hecho, no quiere decir que todos lo hagan. El caso está en manos de un instructor. Se va a llegar hasta las últimas consecuencias que dicte él. Hay dos personas suspendidas de empleo y sueldo que pueden alegar.

-¿Es cierto que empresas próximas a usted se han beneficiado de trabajos hechos en el Ayuntamiento?

-Yo no soy administradora única de ninguna empresa como se ha dicho. Mi marido tiene una carpintería y en algún momento se le contrató algunos servicios en el anterior mandato. Pero no ha tenido ningún privilegio. Al contrario. Ha recibido más perjuicios que beneficios. Han vuelto a llamarle pero yo me he negado a que prestara más servicios al Consistorio. Si llego a saber la repercusión que esto ha tenido no hubiera dejado que realizara los servicios.

-¿En qué estado se encuentra el pago a los proveedores, uno de los desembolsos que más ahogan a los consistorios de la comarca?

-A quien más debemos es a la Seguridad Social y a Hacienda. Tenemos una deuda de unos 38 millones de euros. Además, tenemos deudas de mandatos anteriores, que vamos pagando poco a poco. El objetivo es poner en circulación dinero para no ahogar a los proveedores, para darles estabilidad. Mis previsiones es que cada mes paguemos las nóminas de los trabajadores y entre 300.000 ó 400.000 euros a los proveedores.

-Este mandato el número de cargos de confianza ha pasado de 14 a 20. ¿Puede el Ayuntamiento afrontar estos salarios?

-La cuantía salarial de estos cargos es la misma que la que teníamos en el mandato anterior. Lo que hemos hecho ha sido redistribuir los sueldos. Una persona que antes cobraba 1.400 euros ahora percibe 1.080, cantidad que ya incluye las dietas. No obtienen ningún otro tipo de remuneración. Estos cargos no tienen relación laboral con el Consistorio para que se puedan quedar. Ellos saben que no se van a quedar porque en su contrato está muy claro. El día que yo me vaya se van todos. Ojalá se hubiera hecho lo mismo anteriormente.

-¿Trabajan 57 familiares suyos en el Consistorio?

-Este caso está en los juzgados. Que me digan una que sea familiar mío. Seguramente hay gente que se pueda llamar, por ejemplo, Muñoz Rodríguez, pero no son familiares míos. Lo garantizo.

-¿Asumirá el Ayuntamiento de Manilva la factura de la luz de la A-7, como han hecho otros consistorios como el de Marbella?

-El Ayuntamiento ahora mismo no puede hacer frente al coste del alumbrado con los medios económicos de que dispone. Pero si alguna administración supramunicipal, como el Ministerio de Fomento, se comprometiera a pagar parte de la factura retomaríamos el tema.

-En los últimos meses el PP se ha hecho con el gobierno de administraciones como la Diputación Provincial, la Mancomunidad o el Gobierno central. ¿Cómo es la relación entre un Ayuntamiento liderado por IU y estos entes?

-Estoy decepcionada con la Diputación ya que los recortes que ha emprendido afectan a un camión para recoger residuos sólidos que queríamos comprar y los contenedores. Además, una negligencia del ente con Manilva impide comenzar unas obras en el municipio. Con la Mancomunidad tenemos una buena relación, aunque debería evitar la duplicación de algunos servicios. El Gobierno central concede fondos de los cuales una gran parte se quedan por el camino porque hay muchos intermediarios de por medio.

-¿Cómo califica el papel de la oposición?

-Ellos tienen que controlar mi gestión. Pero tampoco se puede hacer sangre cuando no se saben las cosas con certezas. La oposición ha confundido mucho a la opinión pública. La realidad es que este Ayuntamiento está saliendo para adelante desde que soy alcaldesa, a pasar de las muchísimas trabas que tengo.