Ocho de marzo de 1914. Se celebran elecciones a Cortes. En Benagalbón, un guardia civil es degollado. De su muerte, culpan injustamente a tres miembros de la familia Roldán. El padre, la madre y el hijo, pasan doce años en prisión por un crimen que no cometieron. Este oscuro episodio no pasó desapercibido para el periodista Eduardo Sanjuán Albi, quien a través de sus artículos en el periódico El Diluvio de Barcelona consiguió la liberación. Málaga también se volcó en la petición del indulto. Cien años después, Rincón de la Victoria rindió homenaje a las víctimas: Domingo Almodóvar, el guardia civil fallecido; y a la familia Roldán, que perdió doce años de su vida por unos hechos de los que no era culpable.

A 11:00, los miembros de la asociación Rincrea-Iniciativas Ciudadanas y el Círculo Cultural de Bezmiliana acudían al cementerio de Rincón de la Victoria para hacer una ofrenda floral a Domingo Almodóvar. El autor del crimen, según las investigaciones de Miguel Alba, huyó sin que nunca se supiese de él. Fue precisamente este historiador quien hace tres años escribió el libro La tragedia de Benagalbón en el que narraba los hechos. Gracias a los artículos de prensa se movilizó a toda la sociedad española. "La fuerza de la pluma consiguió su liberación [la de la familia Roldán]", destacaba Alba quien leyó durante el acto una carta del nieto, el también periodista Eduardo Sanjuán, agradeciendo el reconocimiento a su abuelo. Al acto también acudió el alcalde, Francisco Salado (PP) y miembros de la Corporación rinconera.

En el cementerio de Benagalbón, una hora después, se rendía homenaje a los Roldán. Muchos familiares quedan todavía viviendo en este núcleo de Rincón de la Victoria, donde antes se encontraba el Ayuntamiento. Nietos y sobrinos habían vivido sabiendo de "la injusta acusación". "Siempre habían estado señalados por ser los asesinos del guardia, pero crecimos sabiendo que ellos no habían matado a nadie", recuerdan sus familiares. El investigador afirma que si Eduardo Sanjuán fue capaz de movilizar a la opinión pública española, "Málaga se volcó". En 1915, el día en que el Gobierno debía decidir si indultaba de la pena de muerte a los acusados, se produjo "la manifestación más numerosa que se recuerda en la ciudad". Según cuenta, todos los comercios se cerraron y se recibieron más de 3.000 telegramas en favor de los reos de Benagalbón.

"Con estos actos ambas entidades desean el mayor respeto y conocimiento de lo que sucedió en un día trágico en Benagalbón que, además de ser asesinado un guardia civil, supuso el que se cometiese una grave injusticia con toda una familia.

Los actos de homenaje comenzaron el viernes por la tarde con la conferencia La tragedia de Benagalbón de 1914, de Miguel Alba Trujillo en la Casa Fuerte Bezmiliana. El investigador estuvo durante dos años y medio recopilando información para publicarla en el libro del mismo nombre editado por la Diputación Provincial. Está dividido en dos partes: una primera en la que relata estos sucesos y la segunda, dedicada a la campaña liderada por el periodista valenciano Eduardo Sanjuán Albi, a través de sus artículos en el periódico El Diluvio de Barcelona, con los que finalmente consiguió la liberación.