Tras quince días con las puertas de la residencia de ocio y tiempo libre de Marbella cerradas sus doscientos trabajadores siguen sin saber cual será su futuro laboral. Hasta el momento, tienen el compromiso de la Junta de Andalucía de que serán reubicados en otros centros de trabajo correspondientes a la administración, aunque en la mente de muchos está el recuerdo de la temporada pasada, cuando no llegaron a aterrizar en sus nuevos destinos a pesar de haber sido designados.

La residencia de ocio y tiempo libre ha cerrado este año antes que nunca. Si hace unos años las instalaciones permanecían abiertas hasta pasadas las fiestas navideñas, el pasado ejercicio se echó el cerrojo en octubre y éste, en septiembre, con el consiguiente acortamiento de contrato de los fijos discontinuos que ya están en las listas del paro.

Según explicaron desde el sindicato CSIF, la Delegación de Empleo aún no ha informado a los trabajadores de la fecha de reapertura, ha obligado a la plantilla a disfrutar de sus vacaciones y ahora se han reincorporado a la residencia a pesar de que está cerrada. Por ello, el representante de los trabajadores, Antonio Sánchez, teme que la Junta "esté tratando de argumentar el posible despido de parte de la plantilla basándose en que tiene a 200 personas contratadas para prestar servicio en un centro que está cerrado".

Desde el sindicato no descartan iniciar movilizaciones en las próximas semanas para exigir respuestas, en la misma línea de que sucediera el año pasado cuando una veintena de empleados protagonizó un encierro para protestar por las condiciones en las que se estaba llevando a cabo el cese de la actividad.

Lo que también sospechan los trabajadores y los sindicatos es la Junta tenga la intención de "abrir solo en temporada alta en lugar de los seis meses actuales". Tampoco comprenden los empleados por qué en temporada baja las instalaciones no permanecen abiertas, "no ya con precios sociales, si no con precios de mercado que supusieran una inyección económica para el mantenimiento de la residencia", según Sánchez.