Provincia

Marbella pone a punto sus colegios de cara al próximo curso

  • Un centenar de operarios municipales trabajará en las actuaciones de mejora hasta principios de septiembre · Las labores cuentan con 280.000 euros de presupuesto

El Ayuntamiento de Marbella se ha puesto manos a la obra para que los colegios y guarderías municipales estén listos para el próximo curso académico. Unos 100 operarios de la Delegación de Obras trabajarán entre julio y principios de septiembre en los 25 centros de la localidad, entre los que se incluye la Escuela Oficial de Idiomas, en la reparación de las deficiencias de los equipamientos, detectadas tras inspecciones que se han realizado en los centros o a petición de la comunidad educativa. Las actuaciones abarcan "todos los servicios que realiza la concejalía, desde obras de albañilería, carpintería, cerrajería y pintura, hasta actuaciones en los patios, pistas deportivas, solerías o baños", explicó el responsable del ramo, Javier García, que ayer visitó los trabajos que se desarrollan en el colegio Federico García Lorca.

La precaria situación que atraviesan las arcas municipales condiciona la intensidad de las actuaciones. Este ejercicio, el Consistorio invertirá unos 280.000 euros en actuaciones "exclusivamente" orientadas a conservar los centros, señaló el concejal. Fuera del presupuesto quedan actuaciones como la construcción de despachos, almacenes, arreglos de infraestructuras o de instalaciones eléctricas, que, según García, competen a la Junta de Andalucía. El delegado aseguró que la comunidad educativa "es consciente" de la compleja situación económica del Consistorio.

Estas actuaciones se suman a las que en Semana Santa emprendió el Ayuntamiento en quince colegios y dos guarderías, y que supusieron un desembolsó de 400.000 euros. Esas obras fueron "más allá del mero mantenimiento", señaló entonces la regidora, Ángeles Muñoz. Entre las labores destacó la ampliación de la biblioteca del colegio Al-Andalus, en el distrito de Nueva Andalucía.

Esos trabajos se acometieron después de que colectivos del sector educativo criticaran al Ayuntamiento por el retraso en las reparaciones de los desperfectos que un fuerte viento de principios de febrero ocasionó en algunos centros. En el colegio Santa Teresa, un muro se derrumbó y otro amenazó con desplomarse debido a unas grietas. En el instituto Guadalpín, el aire arrancó una tapia y en el colegio Valdeolletas causó destrozos en la cubierta del inmueble.

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