Más control policial en las urbanizaciones y en el puerto deportivo. Éstas son las exigencias que plantearon ayer los administradores de fincas al alcalde de Benalmádena, Enrique Moya (PP), y a la edil de Comercio, Concha Cifrián, en la primera reunión que mantuvieron para conocer las necesidades esenciales de los vecinos. La concejal aseguró que el Consistorio se ha comprometido a "coordinar" todos los cuerpos de seguridad para asegurar la presencia de agentes tanto en las urbanizaciones como en el puerto.

"El Puerto es uno de nuestros principales focos de atención. Tenemos que trabajar para conciliar el ocio con el descanso, por lo que centraremos la atención en eliminar el botellón, habilitar la iluminación en la playa Fuente de la Salud y reforzar la limpieza en el entorno así como la presencia policial", explicó el alcalde. Otro de los puntos tratados fue la petición de que el Ayuntamiento supervise que los promotores de Benalmádena cumplen todos los requisitos antes de conceder la licencia de primera ocupación. Con esta medida, según Cifrián, se pretende que posteriormente las comunidades de vecinos "no tengan que hacerse cargo de los desperfectos de las viviendas".

Paralelamente, el alcalde mantuvo otra reunión con representantes de las 12 entidades financieras presentes en Benalmádena. En ella el regidor anunció la creación de un Plan Económico Financiero para favorecer el saneamiento de las deudas pendientes de pago que se mantienen con empresas y autónomos. El plan deberá ser aprobado en el próximo Pleno.