En tiempos de crisis hay que agudizar el ingenio para conseguir liquidez económica. También los ayuntamientos donde se afanan por conseguir restablecer el vacío financiero que ha dejado la crisis del sector inmobiliario. La falta de ingresos que ha provocado la caída de las licencias urbanísticas debe suplirse con otras medidas que restauren las arcas municipales.

Es el caso de Rincón de la Victoria, que ha optado por mirar atrás para recomponer la deuda cifrada en 26,7 millones de euros. Si no se construye, habrá que repasar las promociones ya levantadas. Según estimó el edil de Hacienda, Salvador Domínguez (Psirv) desde 2006 existen en el municipio alrededor de 3.000 viviendas construidas con licencias de primera ocupación que no están tributando. La mayoría corresponden a las promociones vendidas en Parque Victoria -urbanización ubicada al norte de la autovía- y en Huerta Julián, en el centro del municipio, donde hay unos 400 pisos nuevos. "Hemos tenido una reunión con el Patronato Provincial de Recaudación para que revisen los padrones con el fin de poder incorporar estas viviendas pendientes y cobrar los derechos reconocidos", explicó Domínguez, quien anunció que también tienen prevista una cita con el catastro para poder dar el alta a estas viviendas en los próximos meses.

Según las previsiones del área, esta acción podría generar un millón de euros más de ingresos para 2008. Además de que los nuevos vecinos paguen el Impuesto de Bienes Inmuebles, la revisión implicaría la imputación automática de otros tributos como la basura, el agua u otros servicios públicos.

Sin embargo, otros, como el de vehículos sobre tracción automática también pasarán a cobrarse de forma automática. "Vamos a cruzar datos con las áreas de Urbanismo o Tráfico para poder detectar las bolsas de fraude que existen en el municipio para incorporarlas en la recaudación", manifestó el edil de Hacienda quien estima que los ingresos generados por impuestos directos llegarán a alcanzar a final de año los dos millones de euros.