El Ayuntamiento de Ronda aprobó recientemente en sesión plenaria el iniciar el procedimiento para renovar su Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), tras lo que tocará ahora el turno de elaborar una nueva ordenanza municipal para regular el sistema de concesión de las licencias urbanísticas.

El delegado municipal de Urbanamismo, Jesús Vázquez, anunció este jueves que desde el Consistorio se quiere realizar esta modificación y mejorar el sistema actual, con el objetivo de poder hacerlo más ágil y que sea más efectivo para aquellos ciudadanos que quieren realizar algún tipo de obra o empresas que vienen a realizar inversiones en la localidad.

Además, también se busca el poderse adaptar así también a los futuros cambios que se espera que se puedan introducir por parte del Gobierno andaluz en la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA).

Además, desde el Consistorio se anunció que se quiere contar con las sugerencias que puedan hacer las empresas, colegios oficiales o los propios vecinos para mejorar el sistema actual. En este sentido, también indicó Vázquez que pueden apuntar aquellos aspectos que consideran que no están funcionando de forma adecuada y que cree que deben ser modificados por las futuras ordenanzas, en las que se espera que la declaración responsable pueda tener un papel importante.

Eso sí, aquellos que quieran realizar sus aportaciones tendrán hasta el próximo 15 de agosto para poder hacer el registro de la mismas en las oficinas municipales. No obstante, algunos de los aspectos que mayores quejas y retrasos ocasionan tendrán que quedar apartados, ya que la falta de un Plan Especial del Casco Histórico hace que buena parte de las actuaciones que se proyecten en esta zona tengan que ser revisadas e informadas por los técnicos de la delegación provincial de Cultura, lo que hace que los proyectos que son planteados en esta zona acumulen importantes retrasos.

Unos proyectos en los que se incluyen importantes actuaciones, como la transformación de dos antiguos colegios en futuros hoteles o una simple reforma interior de una vivienda que no llegue a tocar la estructura exterior de la misma.

Precisamente, desde el Consistorio también se anunció que la redacción de este documento de regulación urbanística se acometerá de forma paralela a la redacción del nuevo Plan General de Ordenación Urbana, lo que vendría a solucionar este problema.

De momento, desde la delegación de Urbanismo se busca dar mayor agilidad al sistema para que los ciudadanos pueden tener más comodidad a la hora de poder realizar obras en aquellas zonas en las que no necesitan de una autorización especial, como es el caso del conjunto histórico. En este sentido, Vázquez, animó a la participación de los vecinos para aportar ideas encaminadas a conseguir el objetivo marcado por el Gobierno municipal, ya que de este modo se podrán también registrar las sensaciones que percibe el usario a la hora de afrontar una actuación urbanística en la ciudad.