La ex alcaldesa de Marbella Marisol Yagüe no intentó influir para que se interrumpiera la tramitación de algunos atestados de tráfico, que se habían iniciado en la Jefatura de Policía Local. En su comparecencia de ayer en el Juzgado de Instrucción número 4 de la ciudad como imputada en la causa, que investiga la presunta sustracción de varios expedientes de tráfico en dependencias policiales, la ex regidora dijo no recordar si realizó alguna llamada a la Jefatura para interesarse por la denuncia interpuesta contra un sobrino del periodista José María García, que había sido detenido tras dar positivo en un control de alcoholemia.

El abogado de Yagüe, Ernesto Osuna, señaló que la conversación telefónica pudo producirse porque su representada realizaba "multitud de llamadas al día" a la Policía para aportar información a ciudadanos que se lo solicitaban por distintos motivos. En ningún caso, continuó el letrado, la ex alcaldesa intentó influir en los trámites que se seguían en el área de atestados. Los argumentos de la ex alcaldesa fueron avalados por un agente de la Policía Local, que ayer declaró como testigo y apuntó que ella lo llamó a Jefatura "sólo para conocer el estado" del detenido.

En este mismo caso también se encuentra imputado por presunta omisión de perseguir delitos el ex jefe de la Policía Local Rafael del Pozo, que negó ante el juez haber intervenido en la sustracción. El origen de esta denuncia está en una comparecencia en los juzgados de un policía que acusa al inspector responsable del área de atestados, Francisco Javier Martín, de haber hecho desaparecer tres diligencias.