La asociación El Buen Samaritano presentó ayer el que será el primer economato social de Ronda, que sus promotores piensan inaugurar la semana siguiente al puente de la Constitución y la Inmaculada. El amplio local, que pertenece a la Iglesia Católica y por el que el colectivo pagará una cantidad simbólica en concepto de alquiler, está situado en la calle Santa Cecilia, 70, y se convertirá en un supermercado al que podrán acudir todas las familias rondeñas que se encuentren en riesgo de exclusión social. El objetivo es paliar las necesidades de muchas de ellas, con dificultades para llegar a final de mes.

En el economato podrán encontrar alimentos básicos y productos de limpieza e higiene. Para poder acceder al mismo sólo tendrán que presentar sus datos económicos. Una vez analizados y baremados por los responsables del supermercado social, las familias podrán disfrutar de ventajas en la adquisición de productos. De hecho, dependiendo de las necesidades de cada grupo, el importe para la compra se podría ver multiplicado por cuatro. Es decir, pagando 6 euros se podrían adquirir productos por 24 euros, con todos los artículos a precio de coste. "La idea es paliar la situación de muchas familias que no alcanzan con las ayudas de Cáritas o los Servicios Sociales. Aquí podrán adquirir productos de primera necesidad a un coste muy por debajo de los precios de mercado", explicó la hermana María, una de las grandes impulsoras del proyecto.

Otra de las ideas es la de beneficiar a la figura del llamado pobre vergonzante. "Muchas personas atraviesan dificultades pero prefieren callar y sufrir necesidades a solicitar cualquier ayuda a las entidades benéficas, y aquí podrán sentirse como compradores y por tanto no sentirán esa angustia de estar viviendo de la caridad, sino la sensación de que están adquiriendo los productos con su propio dinero", continuaba la religiosa.

Aunque fue presentado ayer, la idea del economato social se le ocurrió a los miembros de la asociación hace más de un año y desde entonces han venido trabajando en ella hasta verla hecha realidad. Aunque todavía sin inaugurar, este singular súper cuenta ya con el personal que atenderá a los futuros clientes.