Un hombre de 33 años ha ingresado en prisión como presunto miembro de una red criminal neerlandesa especializada en extorsiones y tráfico de estupefacientes y por su relación con la bomba de fabricación casera hallada en una urbanización de Marbella.

La investigación se inició en septiembre a raíz de la localización de un explosivo que contenía dinamita industrial, cuya fabricación se atribuyó a un experto en este tipo de materia, según ha informado hoy la Policía en un comunicado.

Tras las primeras pesquisas, los investigadores comprobaron que el fabricante era un individuo de origen magrebí y nacionalidad neerlandesa, que formaba parte de una organización criminal especializada en tráfico de drogas y que operaba con armas de fuego y explosivos.

Los agentes encontraron en el domicilio del investigado un subfusil y tres pistolas junto con tres cajas de munición y, posteriormente, fue detenido como presunto responsable de los delitos de pertenencia a organización criminal y tenencia ilícita de armas y explosivos.

Asimismo, la Policía ha informado de que la red criminal a la que el arrestado pertenece utiliza artefactos explosivos y armas de fuego para atentar contra la vida de los integrantes de otros grupos criminales rivales que estuvieran en España.