Provincia

El restaurante de La Fonda ya funciona a pleno rendimiento

  • El establecimiento, que retomó su actividad el 20 de enero, cuenta con reservas

El restaurante de la escuela de hostelería La Fonda, en Benalmádena, funciona ya con total normalidad tras recibir el dinero adeudado por parte de la Junta de Andalucía. El ingreso se hizo efectivo a finales de diciembre lo que ha servido de auténtico bálsamo al centro de enseñanza para poder abrir el restaurante, algo esencial ya que los alumnos realizan sus prácticas culinarias. Incluso el establecimiento trae consigo una buena fama forjada por los platos elaborados por los estudiantes, algo que se puede palpar en las visitas y en las reservas cerradas para comer en el restaurante. Tan crítica fue la situación que hasta los propios alumnos tuvieron que traerse ingredientes de casa con los que poder cocinar. No quedó otra: o eso y meterse en los fogones o solamente aprender lo que dicen los libros

El espacio abrió de nuevo sus puertas el pasado 20 de enero y ya cuenta numerosas reservas fijadas. Según ha podido saber este periódico, el restaurante permanecerá abierto hasta junio siempre que el centro tenga una situación de liquidez. Al parecer, el pago recibido por parte de la escuela supone la vuelta a la normalidad para unos meses aunque, según señalan, el ingreso no servirá para cubrir los gastos de todo el año.

El arranque del curso ha sido una auténtica pesadilla tanto para los estudiantes como para el profesorado debido a la falta de ingresos que tenía pendiente hacer el Gobierno andaluz. El alumnado regresó a las clases el 18 de noviembre con mes y medio de retraso cuando el curso tenía que haber empezado a primeros de septiembre. Los 24 estudiantes de cocina y los 32 de salas matriculados ya están metidos de lleno en las lecciones que reciben de los profesionales del sector y de los libros pues ya ha pasado más de medio curso.

El restaurante pospuso su apertura debido a la deuda que mantenía con los proveedores. El centro no tuvo más remedio que anular todas las reservas de clientes habituales que llegaban debido a la falta de dinero. Los empleados del centro también pasaron dificultades ya que se les adeudaba el pago de las dos últimas nóminas, algo que se repitió el pasado año hasta en cuatro ocasiones. Las promesas de pago por parte de la administración autonómica se escucharon desde la segunda mitad del año pasado. Finalmente llegó casi al expirar el año. Ahora todo es normal pero avisan que con el ingreso será insuficiente para poder cubrir los gastos de todo el año.

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