Una escuela taller y un espacio de coworking. Eso es lo que dos artesanos de Mijas han puesto en marcha tras constituirse como cooperativa con el objetivo de ofrecer espacios en el municipio a otros compañeros que así lo necesiten para divulgar y promocionar sus creaciones entre los vecinos y visitantes que llegan a la localidad. La iniciativa, que surge a raíz del Proyecto Lunar del Cade de Málaga, permitirá dar a conocer de primera mano los oficios que ambos profesionales llevan realizando desde hace años, como es la cerámica en el caso de José Angulo, y la confección en Sonia Lekuona. Pero también podría albergar talleres de oficios casi desaparecidos como la talabartería de la mano de la única profesional que realiza este oficio en la provincia de Málaga, así como de artesanos procedentes de otras partes del mapa.

También cuentan con un espacio para la exposición y venta de productos artesanales

“Será un espacio abierto en el que quien quiera puede vernos trabajar a la vez que daremos clases y talleres tanto para aquellas personas que quieran iniciarse en este oficio como para profesionales que busquen perfeccionar su técnica”, indicó Lekuona, que agregó que “el fin nuestro es la divulgación y la promoción de la artesanía a través de las enseñanzas y también ayudar a otros artesanos a que puedan subsistir”. De ahí el nombre del proyecto, Puerta del Ágora, centro de la actividad política, comercial y social de la antigua Atenas, que espera convertirse en un nuevo punto de encuentro para la artesanía del municipio mijeño, recientemente declarado como Zona de Interés Artesanal por la Junta de Andalucía, una distinción con la que hasta ahora tan solo contaba en la provincia el municipio de Vélez-Málaga.

De esta manera, ambos profesionales han unificado sus talleres en un mismo espacio, inaugurado este mismo viernes, que además hará las veces de escuela taller. “Los dos teníamos muy claro que lo nuestro era la docencia pero nuestros talleres eran muy pequeños y nos limitaban mucho a la hora de dar clases”, explica esta esta artesana, quien aclara que los talleres “no se limitan solo al turista que quiera saber cómo se hace cerámica o cómo se hace un bolso, sino que estarán dirigidas a colectivos como niños con autismo, grupos de mayores afectados de alzheimer, escolares o incluso profesionales del sector.

De momento ya han reservado los sábados por la mañana para llevar a cabo talleres infantiles mientras que los miércoles se realizarán monográficos dirigidos a turistas, principalmente a grupos procedentes de los países escandinavos que asegura son los más interesados en este tipo de actividades. Al mismo tiempo, por las mañanas se realizarán clases de cerámica y confección y por la tarde el espacio estará abierto para aquellos artesanos que quieran realizar talleres sobre su oficio. “Con los años nos hemos dado cuenta de que muchos artesanos quieren pero no tienen espacio en sus talleres para dar clases, como nos ocurría a nosotros. De esta manera ahora pueden reservar un espacio donde llevarlo a cabo”, apunta.

Por otro lado, también ofrecen la posibilidad de alquilar espacios de coworking. “Está diseñado especialmente para aquellos artesanos que vienen aquí solo unos meses para hacer la feria de verano y les haga falta un espacio para trabajar. De esta manera no tendrían que alquilar un local entero por un año, sino que ofrecemos la posibilidad de alquilar un espacio junto a otros artesanos por solo unos meses”, explica. En total tienen cabida para entre tres y siete artesanos, en función del espacio que requiera cada uno. Una iniciativa para la que ya cuentan con una reserva de una artesana procedente del municipio de Coín.

Por último, reservan otro espacio para la promoción y venta de productos artesanales, otra forma de dar a conocer a otros profesionales y sus creaciones, entre los que se encuentran artesanos procedentes del País Vasco y Galicia, entre otros.