La suspensión de militancia a los integrantes de la asamblea socialista de Ronda, con la excepción de los siete concejales actuales y la directora general de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, Isabel Aguilera ha provocado una aluvión de reacciones entre los indignados socialistas rondeños, como ellos mismos se definen. Las redes sociales se han convertido en zona de debate y son numerosos los comentarios que se han lanzado sobre este asunto a raíz de la información dada por este periódico. La mayoría de ellos contrarios a la gestión que está realizando de este asunto la dirección provincial y acusando a su secretario general, Miguel Ángel Heredia, y al secretario de Organización en Málaga, Francisco Conejo, de ser los responsables de toda esta situación, que califican muchos de ellos como "surrealistas".

Muchos de ellos ponen en duda la capacidad de dirigir el propio partido, al tiempo que consideran que tras la decisión se encuentra la pérdida del control que tenía la dirección provincial en la agrupación de Ronda. Es el caso de la exconcejal socialista Josefa Becerra, que ayer hizo público su malestar y dejó clara su disconformidad con la medida que se ha adoptado. Además, lamentó haberse tenido que enterar, tanto ella como sus compañeros "por la prensa".

Otro de los que ha utilizado su perfil en Facebook para comentar este asunto ha sido Juan Fraile, asegurando que "cacicadas se han visto pero como ésta pocas". En su comentario también afirma que se les condena "sin haber sido imputados", en referencia al malestar creado por estar sustentada la suspensión en la existencia de una investigación sobre presunta corrupción urbanística.

No obstante, la mayoría de los socialistas destituidos coinciden en señalar que seguirán "trabajando" como si tal medida no se hubiese adoptado, y aseguran que harán campaña para que José Antonio Griñán siga siendo presidente de la Junta de Andalucía.