El Ayuntamiento de Rincón de la Victoria, la empresa pública Axaragua e Hidralia quieren combatir el problema de las toallitas en la red de saneamiento y drenaje urbano. Para ello van a poner en marcha el proyecto Ion Wiepes que ejecutará Cetaqua Andalucía con el que se pretende detectar y registrar la acumulación de residuos sólidos o “tortas” en bombeos de aguas residuales. Esto se hará a través de un sistema de motorización de visión artificial y el objetivo es determinar los principales factores de influencia.

La consejera delegada de Hidralia, empresa que gestiona el servicio de agua y alcantarillado, Matilde Mancha; el presidente de Axaragua, empresa pública dependiente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Axarquía, José Juan Jiménez y Enrique Gutiérrez, Gerente de Cetaqua firmaron este viernes el convenio de colaboración público-privada en el Ayuntamiento de Rincón de la Victoria.

El sistema se instalará en Torre de Benagalbón y en La Cala del Moral

El proyecto se realizará en dos ubicaciones. La primera, gestionada por Axaragua, es el bombeo de aguas residuales situado en Torre de Benagalbón que permitirá evaluar la utilidad en grandes infraestructuras de bombeo de aguas residuales (EBAR). La segunda, se trata de un bombeo de menor tamaño gestionado por Hidralia y situado en la Cala Las Flores de Rincón de la Victoria que permitirá evaluar la utilidad del sistema en ebar.

Cetaqua Andalucía es una fundación creada en 2014 por Hidralia, la Universidad de Málaga (UMA) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Este modelo de colaboración público-privada, según explicaron a través de un comunicado, que fue creado para garantizar la sostenibilidad y eficiencia del ciclo del agua considerando las necesidades territoriales, se ha consolidado como una referencia en la aplicación del conocimiento académico al agua y al medio ambiente, creando productos y servicios que benefician a la sociedad”. Desde Hidralia recordaron que “las toallitas atascadas en el alcantarillado son un problema medioambiental que se ha agravado con la aparición de las que son húmedas”.

En cifras supone un coste de 200 millones de euros al año en trabajos de depuración según los datos aportados en un informe de la Asociación de Operadores de Agua (AEAS).