La Casa del Rey Moro de Ronda volvió a abrir este viernes sus puertas tras varias semanas cerrada a causa del expediente abierto por el Ayuntamiento y que llevó a suspender la actividad de visitas debido al peligro que consideraban los técnicos municipales que existía para los visitantes.

Ahora, tras concluirse que la propiedad corrigió todos los aspectos que consideraban necesario desde el Consistorio para poder abrir nuevamente sus puertas, este viernes comenzó a recibir visitas nuevamente, según indicaron en un comunicado desde la propiedad del inmueble.

Además, explican que se continúa trabajando en la musealización de las instalaciones y que pronto se comenzará a trabajar en este mismo aspecto sobre los jardines, uno de los elementos más destacados del espacio y que están considerados como Bien de Interés Cultural (BIC).

Editarán un libro con los resultados de la investigación de la UMA sobre los jardines

En este sentido, indicaron que también se prepara una edición de un libro con los resultados de la investigación que se está realizando por parte de la Universidad de Málaga sobre dicho espacio ajardinado, que es obra del reconocido paisajista, Jean-Claude Forestier, por encargo de la duquesa de Parcent.

De igual modo, también se espera realizar otra publicación con los resultados que se están realizando por parte de un equipo de investigadores sobre la mina que conduce hasta el fondo del Tajo de Ronda y que permite acceder al cauce del río Guadalevín tras descender por una escalera excavada por el interior de la pared del cortado rondeño.

Dentro de las mejoras para el visitante se anunció que los turistas que acceden al interior dispondrán del servicio de audioguías de forma gratuita, teniendo en el mismo una especial relevancia la historia de Ronda.

Tras abrir las instalaciones se pone fin al último enfrentamiento vivido entre el propietario y el Consistorio rondeño, que mantienen desde hace varias décadas una disputa sobre el proyecto inicial que contempla la construcción de un hotel de 5 estrellas.

Una lucha que terminó en los tribunales y que se resolvió a favor de la propiedad, aunque en este tiempo el inmueble se deterioró y el Consistorio viene exigiendo la rehabilitación del mismo.