La calidad en las terapias oncológicas para los pacientes tiene mucho más que ver con la tranquilidad que con su efectividad. Esto es así porque "no conocen la eficacia de los fármacos ni la preguntan, confían en que la decisión que toma el médico sobre su tratamiento es la adecuada", indica Albert Jovell, médico, sociólogo, doctor en salud pública y paciente oncológico. Según el experto, "tanto para los afectados como para sus familiares, la información tiene un gran valor terapéutico", por ello, apunta al establecimiento de contacto con "pacientes veteranos" como un modo de "sobrellevar la situación, sobre todo los problemas no clínicos (despidos, divorcios,...) que aparecen una vez acabado el tratamiento, cuando llegan las depresiones, las ansiedades y la vida acaba consistiendo en esperar la fecha de la próxima prueba de seguimiento". La presencia de esta figura transmite credibilidad al enfermo porque proyecta un mensaje de supervivencia y conoce sus necesidades.

El oncólogo tutor también es esencial para Jovell, pero aún no es una realidad en España. Se trata de un profesional que coordina todo el proceso de atención y orienta al numeroso equipo multidisciplinar que participa en el proceso diagnóstico-terapéutico, es "tú médico" y "recibir una sola opinión que transmita él, aunque sea consensuada entre todo el equipo, reduce la incertidumbre que genera obtener los diferentes pareceres de los doctores con los que se relaciona el paciente; reduce el miedo que provoca la incertidumbre que trae consigo el diagnóstico de cáncer", asegura.

En esto coincide con el estudio La atención multidisciplinar en Oncología: un paradigma de calidad, elaborado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), que ha contando con la opinión de 37 profesionales médicos de cinco comunidades autónomas diferentes. Su objetivo es conocer la implantación de la atención multidisciplinar como eje del modelo organizativo de la atención oncológica, propuesto por el Sistema Nacional de Salud.

Entre sus conclusiones destacan la necesidad de constituir comités de tumores multidisciplinares, que reúnan periódicamente a los profesionales vinculados al proceso terapéutico de los pacientes con cáncer e impulsar la figura del médico tutor. Para lograrlo hay que "sensibilizar a las autoridades sanitarias sobre este asunto", indica Ramon Colomer, presidente de SEOM.