El actor malagueño Antonio Banderas ha vuelto hoy a dirigir un trono de su cofradía de la Semana Santa de Málaga y además ha cantado la letra de una marcha que ha contribuido a escribir para su Virgen, la de Lágrimas y Favores, con la baronesa Carmen Thyssen de testigo y ha oído una saeta de Diana Navarro.

Como mayordomo del trono, Banderas ha dado indicaciones previas a la banda de música que acompañaba la imagen y la baronesa ha dado los primeros toques a la campana del trono para que empezará la procesión después de que le impusieran la medalla de la hermandad, al igual que a su hijo y a su nuera, y le entregaran un cuadro con una imagen de la Virgen.

Antonio está vestido con túnica y un capillo que cubre su cabeza y junto a él su hermano Francisco Javier, conocido entre los cofrades como "Chico" y que también participa en dirigir el trono.

No han faltado a su cita de cada Domingo de Ramos la esposa del artista, la actriz Melanie Griffith; la hija de ambos, Estela del Carmen, y la madre del actor, Ana Banderas, quien ha besado a sus hijos antes de que empezará el recorrido. Ellas son ya habituales en esta procesión de las Reales Cofradías Fusionadas.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, no cesó de explicar los pormenores de cada momento a Carmen Thyssen, que aplaudió la saeta de la cantante malagueña Diana Navarro en la salida, en la que estaba preparado para participar en esta procesión un malagueño habitual de muchos momentos televisivos, "El mocito feliz".

"Lágrimas de San Juan" es la marcha cantada en la iglesia para iniciar recorrido, letra en cuya elaboración ha participado Banderas que, mientras se preparaba en su hermandad para salir, ha explicado en una entrevista que "es un himno para nuestra Virgen".

Su cofradía cree que "llevar un trono no es acarrear un peso de un lado a otro de la ciudad; sino interpretar el sentirlo, ir con la marcha, la música está ahí y hay que buscar ese pellizco".

Anuncia que su cofradía se abrirá con obras sociales y que se reunió con la rectora de la Universidad de Málaga para convocar un concurso de becas anuales insertado en un plan para máster fuera de España de ayuda a estudiantes de Málaga, a los que no se exigirá "ni que se hagan hermanos de la cofradía, ni que sean cristianos; sino ser gente que lo necesite, sean judíos, musulmanes, ateos, no nos importa. Es ayudar a gente que quiera estudiar y no tenga medios".

Prevén 60.000 euros y llegar a 100.000 en unos años y colaborarán con la entidad Cudeca, dedicada a cuidados de enfermos de cáncer, al considerar "fundamental abrir la cofradía a la comunidad".

Banderas defiende la obra social "en tiempos de crisis y en tiempos de no crisis, las cofradías del siglo XXI deben hacerlo, es casi obligación que revierta todo el capital y entramado humano del que disponemos de la forma más práctica".

La baronesa acudió anoche al encendido de velas del trono, acto íntimo entre cofrades, y a la cena de la hermandad, ya que, según el actor, "es vecina nuestra porque el museo se construye prácticamente a dos calles de donde estamos", en referencia al Museo Thyssen.

"Tengo por ella un agradecimiento profundo porque las 280 obras que se expondrán van a dar a Málaga otro relieve más añadido al Museo Picasso y, cuando se abra, al Museo de Bellas Artes. Málaga no es 'after sun' solamente, son otras cosas que hay detrás y podía haber elegido otra ciudad, se ha venido a nosotros, hay que agradecérselo y estamos abiertos a ella en la participación de las instituciones de la ciudad, entre ellas cofradías", ha indicado.

Esta cofradía ensayó con los portadores del trono la forma de llevarlo, lo que ve que "genera hermandad, los hombres cuando llegan al trono se conocen, no son extraños, se pueden reunir todo el año".

Banderas ya dio los pregones de la Feria y el Carnaval de Málaga y está dispuesto al de la Semana Santa de Málaga, si lo decidiera la Agrupación de Cofradías "estaría encantado; si no lo hacen, encantado también"; tiene su idea de lo que para él significa la Semana Santa, pero"hay que articularlo de manera hermosa, no se trata de dar una homilía ni una conferencia, sino de pregonarla".