Cristo agoniza con los últimos sones de la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía del Santísimo Cristo del Mar que acompañan en el duelo a su titular. Cristo ya ha muerto. Vélez- Málaga llora al Cristo de Los Vigías mientras venera al Cristo del Amor que ya es preparado para su sagrado Descendimiento. Este año las calles del centro histórico se volvieron todavía más estrechas cuando pasó María Santísima de las Angustias, que espera ser coronada el próximo 14 de septiembre. Llega el silencio con el Sepulcro, pasa la Cofradía Oficial de Vélez-Málaga. Detrás su madre, la Virgen de la Soledad (Servitas) lo busca desolada por cada esquina.

En el interior de San Juan ya sonaban los primeros compases para el Cristo de los faroles rojos. Una de las grandes obras de la Semana Santa veleña comenzaba su estación de penitencia con el recogimiento que le caracteriza. Recorrió las naves del templo hasta llegar al dintel de la puerta principal donde la cruz fue inclinada para que pudieses sobrepasarlo. Solo de corneta para esta imponente figura de Cristo muerto en la Cruz. Dejó momentos para el recuerdo cuando llegó a su barrio y tomó la curva de San Juan de Dios. Solemne en la calle popularmente conocida como Coroná acompañados por primera vez de la Agrupación Musical de la Hermandad de la Piedad y Estrella de Jaén. También fue un estreno el estandarte en terciopelo negro con pintura del que fuese hermano de la cofradía, el artista Francisco Hernández.

Cristo Crucificado es preparado para ser descendido de la Cruz por los Santos Varones, mientras esperan San Juan y las tres Marías. Le sigue su Madre bajo palio y manto morado. La cofradía Franciscana del Santísimo Cristo del Amor en su Sagrado Descendimiento y María Santísima de la Caridad salía desde la plaza de la Constitución. Perfecta conjunción con la Asociación Musical Las Golondrinas de Vélez-Málaga. Una hermandad que han conseguido trabajar una personalidad propia que imprime en su discurrir por las calles veleñas. Soberbio su paso por la plaza de San Juan así como la curva de Enmedio y su bajada por las Tiendas.

Pasadas las 20:00, y desde el interior de la iglesia de San Juan, salía la Real, Venerable y Muy Antigua Cofradía del Santísimo Cristo del Mar, María Santisima de las Penas, San Juan Evangelista y Santa María Magdalena. Una hermandad que mantiene su carisma procesional y que en un lujo ver en cualquier rincón del casco histórico. En ello tienen mucho que ver su propia banda de cornetas y tambores. La procesión comprimida en calle de Enmedio era un reguero de luz y recogimiento.

Nuestra Señora de las Angustias lució sus mejores galas durante la noche del Viernes Santo, gracias a la mano de su vestidor, el imaginero Israel Cornejo. Tejido de brocado turco en tono marfil con detalles dorados de mediados del siglo XX, dispuesto a modo de tablas y colocado del revés. De las mangas salen puñetas en tono champán con encaje antiguo de los talleres de Cornejo. Lució también puñal sobredorado, como cada año tras año viene luciendo, el fajín de Generalato, impuesto por general subinspector de la Legión Española Julio de la Torre Galán, en 1971. Cuerpo militar que le acompañó durante toda la estación de penitencia por las calles veleñas. También le lo hicieron en su luto a la Virgen, 32 hermanas ataviadas con la mantilla negra. Cerca de las diez dea noche, la Cofradía del Sepulcro con un silencio sobrecogedor salía del interior de San Juan. Momentos antes, se producía uno de los momentos más impactantes de la semana santa veleña. Los niños con carracas se aproximaron al templo, la cofradía oficial de la ciudad, entregaba a Nuestra Señora de la Soledad, los clavos y la corona de Cristo. A la una de la mañana los rezos de Servitas llenarían las calles del casco histórico. El Señor ha muerto,Vélez Málaga está de duelo.