Sociedad

Los guardias civiles se manifestarán contra el Gobierno en septiembre

  • Aseguran que los 'bolis caídos' son un "movimiento espontáneo", pero no una huelga.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y la Unión de Oficiales (UO) han suscrito un acuerdo de "unidad de acción" para defender sus intereses y protestar conjuntamente por la "situación muy crítica" en la que se encuentra la Guardia Civil, en palabras del secretario general de AUGC, Alberto Moya, quien ha aclarado que "no hay ninguna huelga de bolis caídos, porque no tenemos reconocido este derecho, sino un movimiento espontáneo que corre como la pólvora", en referencia al descenso de denuncias en los últimos meses. 

En una rueda de prensa convocada por ambas organizaciones, consideran que el acuerdo es un "paso de unión para salir de este atolladero en el que nos ha metido el Gobierno con sus falsas promesas" y han pedido un mayor "compromiso" para "modernizar las condiciones laborales y de régimen estatutario del cuerpo". En este sentido, han anunciado una "gran manifestación" para el próximo 18 de septiembre en Madrid, que prevén "multitudinaria". Como ha indicado Moya, la presencia de la UO en la marcha "demuestra hasta donde ha llegado la situación".

Por su parte, el vicepresidente de la UO, José Joaquín Jiménez, ha denunciado que la promoción interna, en el caso de los oficiales, "sufre un apartheid", a la vez que ha recriminado que la Guardia Civil sea la policía "con menos derechos y la más barata de Europa". "La opción de los oficiales es irse a la Policía Nacional, porque la Guardia Civil no tiene futuro", ha sentenciado. Ambas asociaciones han pedido una mayor "equiparación" con otros cuerpos de policía, sobre todo en lo relativo a las jornadas laborales. "Un guardia civil hace 22 horas mensuales más que un policía nacional y no cobra lo mismo", ha añadido Moya. 

Moya también ha acusado la carencia de mecanismos de defensa que tiene la Guardia Civil: "No tenemos el mismo poder que los controladores", ha señalado. En este sentido, ha aclarado que "no hay ninguna huelga de bolis caídos, porque no tenemos reconocido este derecho, sino un movimiento espontáneo que corre como la pólvora", en referencia al descenso de denuncias en los últimos meses.

Premian más la denuncia que el servicio

Asimismo, los representantes de guardias civiles han arremetido contra el "resumen de actividades individuales" que "premia más la denuncia que el servicio ciudadano". "¿Qué puntuación hay que dar a un cadáver por proteger la vida de los ciudadanos?", se preguntaba Moya. Sin embargo, han anunciado que "no admiten la presión" y que la "profesionalidad está por encima". El representante de la UO ha concluido criticando al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba que "se comprometió a llevar a la Guardia Civil al siglo XXI y todavía estamos en el XIX".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios