Entrevista a Felipe Romera, Director general del PTA de Málaga

“Las empresas del PTA están bien y no hay que dar el año por perdido”

  • Romera señala que, pese al coronavirus, la tecnópolis malagueña tiene importantes proyectos de crecimiento con nuevos edificios y ve necesaria la digitalización de las compañías

Felipe Romera, director general del PTA, en una imagen de archivo.

Felipe Romera, director general del PTA, en una imagen de archivo. / Javier Albiñana (Málaga)

El Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) acaba de cumplir 30 años desde su constitución oficial. Felipe Romera ha sido su director general desde el inicio y ha vivido todos los vaivenes de este espacio que está más que consolidado nacional e internacionalmente, con 650 empresas y 20.000 trabajadores.

–¿En qué momento está el PTA en esta época de coronavirus?

–Tenemos empresas de servicios que están cerradas, fundamentalmente los restaurantes, la guardería, el colegio o el centro deportivo. Y el resto del parque está trabajando. Un 10%, unas 2.000 personas, en las industrias, algunas incluso con más fuerza al ser de sectores como la alimentación o productos médicos. Y las empresas que tienen a personas delante de un ordenador están todas teletrabajando.

–Debe ser una sensación extraña.

–Me recuerda al parque de los primeros años. Ahora no hay atascos, hay aparcamiento... Es curioso porque el parque está semivacío pero la realidad es que está en plena actividad. El teletrabajo está siendo una experiencia que está para quedarse por muchas razones. Una de ellas es que, con estas nuevas circunstancias, todo el mundo no podría venir al parque porque cada uno tiene que venir en un coche y eso es un pecado mortal para el parque. En los autobuses no permiten que entre mucha gente.

–¿Tienen algún plan contra el coronavirus?

–Estamos trabajando en lo que llamamos parque seguro. Es un eslógan. Es imposible tener un parque sin virus porque los virus están en todos lados, pero sí podemos intentar que existan medidas de protección suficientes para garantizar que los trabajadores estén seguros. Entre esas medidas, que no solo toma el parque sino que queremos que también las desarrollen las empresas del parque, hemos creado un comité específico con las empresas con mayor número de trabajadores para evaluar estos temas. Se basa en aprender porque hay normas pero luego la realidad es la que es. Todos tenemos que aprender juntos la nueva situación. Hay medidas de higiene o de seguridad como medir la temperatura o tener test para la gente, aunque esto último tardaremos mucho en tenerlos hasta que se desatasque el sistema sanitario. Queremos también saber gestionar la reacción de la empresa y del parque cuando haya una infección, que se va a dar. Estamos trabajando con ímpetu en esta idea de parque seguro no solo a nivel local sino con el resto de parques tecnológicos de España. Hemos hecho un protocolo en la sede social para los que nos visiten, dando mascarillas, cambiando el uso de las salas de reuniones... Hay que replantearse los métodos de trabajo.

"El parque está ahora semivacío. Me recuerda al de los primeros años. No hay atascos, hay aparcamiento...”

–Hablaba del teletrabajo. Al final se ha impuesto por la fuerza en lugar de por la conciliación laboral y familiar.

–El teletrabajo está funcionando mejor de lo que la gente esperaba. El tema es que se trabaja a todas horas y hay que enfocar un modelo de teletrabajo que sea más sensato del que hay en estos momentos. En cualquier caso, un efecto positivo de esta pandemia es que ha acelerado los procesos de digitalización.

–Al margen del coronavirus, ¿en qué momento se encuentra el parque? ¿Tiene ya los datos de cierre de 2019?

–Los contaremos cuando termine el confinamiento, pero van en la línea de los últimos años. El parque sigue progresando. Nos ha pillado todo esto en un momento con tres licitaciones abiertas muy importantes para hacer varios edificios en la ampliación del parque y en la universidad. Tuvimos la mala suerte de que, a dos días o tres días para que cumplieran los plazos para la entrega de licitaciones, las tuvimos que suspender por el decreto de alarma. Hemos ampliado en siete días los plazos para que las empresas puedan presentarse con tiempo. Estamos, por tanto, en una fase de crecimiento muy importante. Estamos planificando y desarrollando 50.000 metros cuadrados, en los que en términos antiguos podrían trabajar unas 5.000 personas. Eso nos va a permitir seguir creciendo cuando la actividad económica vuelva a florecer, que no sabemos cuando será.

–¿Tienen alguna previsión sobre la recuperación?

–A día de hoy sabemos que las empresas del parque están bien, que trabajan, que no ha habido Ertes salvo en las de servicios que cerraron, pero la situación económica es muy variable.

"El teletrabajo está funcionando mejor de lo esperado, pero hay que enfocar un modelo sensato”

–¿Se ha frenado la incorporación de nuevas empresas al parque?

–El estado de alarma lo ha frenado todo. Se ha entrado en una hibernación de todos los procesos. Conforme vayamos saliendo veremos qué pasa. Toda la economía está entrelazada y si sufre el turismo pueden sufrir también empresas de otros sectores como el tecnológico. Creo que hasta después del verano no veremos la animación que había antes.

–¿Está este año perdido?

–No. Este año intentaremos empezar la obra del edificio y creo que habrá empresas que sigan creciendo. Hay que ser prudentes pero no creo que haya que dar el año por perdido ni mucho menos. Esta crisis ha puesto de manifiesto que España tiene que incidir más en la cuarta revolución industrial, que es la industria y la tecnología digital. En España nos habíamos dejado llevar, no crecíamos y había mucha diferencia con otras países. En Singapur o Corea del Sur gracias a su gran industria del conocimiento han sido capaces de plantear soluciones más allá de la sanitaria y han frenado el virus. Las empresas pueden ser más resistentes si está más ligadas a la digitalización.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios