En contra de lo que ocurre en cualquier otra profesión, el de cargo público es el único trabajo donde ellos mismos se fijan lo que cobran. Un alcalde puede cobrar más que el presidente del Gobierno.

Lo último en el mercadeo de sillones son los pactos de gobierno dónde nadie sabe quiénes son los que gobiernan y qué parcela tiene cada uno en ese gobierno.

De todas las cosas asombrosas que se han visto en la política, habría que reconocerle al partido de Rivera su capacidad de innovación en el arte de la regeneración y de los cambios sin cambio.

La comunidad autónoma no resiste ninguna estadística de empleo, a pesar de que la UE inundó la región con miles de millones de euros de fondos de formación para combatirlo.

El consejero de Presidencia festeja la coincidencia espacio-temporal de gobiernos del PP en la Junta, Diputación y grandes ayuntamientos de Málaga.

Algunos de los políticos que más se juegan en estas elecciones no se presentan a ninguno de los comicios que se celebran hoy. Con Susana Díaz ocurre algo similar a lo de Casado.

La ausencia de mayorías absolutas obliga a pactos de gobierno, que es la coartada perfecta para incumplir los compromisos adquiridos durante la campaña electoral.

El PP asume, tras la debacle electoral del pasado 28-A, que los alcaldables harán campaña para las municipales evitando las siglas.

En este inmenso maratón electoral, nada más recoger las urnas esta noche, dará comienzo la batalla por las alcaldías.

Como en las elecciones andaluzas, hay una cierta impresión de que existen dos escenarios en esta batalla electoral. Uno que vemos y otro soterrado; este último viaja por WhatsApp.